Motagua se convirtió en el representante del fútbol hondureño para la Concacaf Champions Cup que se disputará en 2025, luego del empate 2-2 ante el Águila de El Salvador, en un partido que, pese a jugar con un hombre menos, supo afrontar y jugar con seriedad al término de los 90 minutos.
Luego de su meritorio triunfo 2-0 en el juego de ida disputado en Tegucigalpa, el Ciclón Azul se volvía a ver las caras ante el Águila de El Salvador en el estadio Cuscatlán, con la misión de avanzar en el juego de ida de repechaje de la Copa Centroamericana y clasificar a la Champions Cup del próximo año.
Tras un ligero dominio de los azules, el equipo salvadoreño se ponía a ganar 1-0 al minuto 30 por intermedio de Dixon Rivas. Lo anterior obligó a una reacción hondureña, que se fue con todo en busca de la igualdad y tuvo algunas ocasiones. Sin embargo, la noche se les vendría encima con la expulsión de Luis Vega al minuto 37. Pero, tras una genialidad de Carlos Mejía, llegó el empate al minuto 53.
Volvía la tranquilidad para los catrachos, ya que al minuto, Agustín Auzmendi ponía el 1-2 después de convertir una falta penal que él mismo provocó. No obstante, una rápida reacción de Edgar Serrano decretó el 2-2. Los restantes minutos fueron de trámite para Motagua y eso bastó para convertirse en uno de los mejores 6 equipos de la Copa Centroamericana.
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Esta clasificación representa no solo un logro para el equipo, sino también para la afición azul, que ha respaldado a sus jugadores a lo largo de la competencia. Con este pase, el Motagua mantiene viva la esperanza de destacar a nivel internacional, demostrando que la garra y determinación del club pueden llevarlos a competir al máximo nivel en el torneo de clubes más prestigioso de la región.