El dengue es una enfermedad que ha azotado a Honduras gravemente en el presente 2024, causando una emergencia sanitaria que ha llenado las salas de los hospitales, donde se prevé que se sume el virus de Oropouche.
Así como el zika y chikungunya, además del dengue, este virus también se transmite por medio de la picadura de los insectos. Sin embargo, en este caso no se transmite comúnmente por el mosquito Aedes aegypti, sino que principalmente por él a través de la picadura del jején Culicoides paraensis, mosquito que está ampliamente distribuido por todo el continente americano.
De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) los casos de virus de Oropouche están aumentando en la región al rededor de Honduras, sin embargo, no ha habido ningún caso oficialmente detectado, a pesar de que se emitió una alerta hace casi 4 meses.
Aun así, no hay que confiarse, pues tal como mencionó el médico Roberto Cosenza, “aquí vienen inmigrantes a diario y ya ese virus clínicamente está en el país desde hace tiempo … Identificarla es difícil, ya que clínicamente la enfermedad presenta síntomas similares al dengue, zika y chikungunya”, detallando la gravedad de la misma.
Ante esto, La Secretaría de Salud (Sesal) buscará prevenir el ingreso de personas portadoras del virus de Oropouche intensificando los puntos de vigilancia en las fronteras de Honduras.
El jefe de la Unidad de Vigilancia de la Sesal, Lorenzo Pavón, explicó que la alerta epidemiológica responde a la propagación del virus en naciones como Bolivia, Brasil, Colombia, Perú y Cuba, sumando más de 8,000 casos el mes pasado. “Hemos considerado necesario, junto con la ministra de Salud, Carla Paredes, emitir esta alerta para informar y preparar tanto a la comunidad como al personal de salud”, declaró Pavón.
¿Qué es el virus de Oropouche?
Según la OPS, el Oropouche (OROV) es un arbovirus que pertenece a la familia Peribunyaviridae y fue detectado por primera vez en 1955 cerca del río Oropouche, en el archipiélago de Trinidad y Tobago, en 1955, seguido de varios brotes en Brasil hacia fines del siglo pasado.
Tal como se mencionó anteriormente, este se transmite principalmente por la picadura del jején Culicoides paraensis, el cual es muy común, sin embargo, se cree que también del mosquito Culex quinquefasciatus puede estar involucrado.
Síntomas del Oropouche
Los síntomas incluyen aparición repentina de fiebre, además de dolor de cabeza, rigidez en las articulaciones, dolores y molestias y, en algunos casos, fotofobia, visión doble, náuseas y vómitos persistentes. Los síntomas pueden durar entre cinco a siete días. Además, en pocas ocasiones, pueden presentarse casos graves con meningitis aséptica y según la OPS, la recuperación completa puede tardar varias semanas.
El doctor Lorenzo Pavón destacó que si bien el oropouche comparte similitudes con el dengue, como la fiebre alta, se diferencia en síntomas como la rigidez en las extremidades y articulaciones, lo que no es común en el dengue. Por ello, todos los pacientes que presenten síntomas compatibles serán sometidos a pruebas de dengue, y en caso de resultar negativas, se realizará la prueba para oropouche.
Cabe destacar que esta enfermedad puede transmitirse al feto durante el estado gestante, además la organización informó que hasta el 25 de julio de 2024 se registró las primeras muertes atribuidas a la enfermedad.
Tratamiento para esta enfermedad
Pavón también admitió la falta de un tratamiento específico para esta enfermedad, y subrayó que en el mercado no existe una vacuna contra el virus, por lo que el tratamiento es principalmente sintomático. Sin embargo, la OPS apunta que además del reposo y la hidratación, el tratamiento de los síntomas puede incluir medicamentos para reducir la fiebre y el dolor como acetaminofén/paracetamol. Se recomienda en estos casos, como en otros con síntomas parecidos, mejor no tomar aspirina ni otros antiinflamatorios como el ibuprofeno, hasta descartar totalmente el dengue.
Para prevenir la propagación de la enfermedad por parte de los mosquitos, se recomienda evitar las áreas infestadas, usar ropa de manga larga y repelente, mantener las áreas limpias, y emplear mosquiteras en puertas y ventanas.