El paso a desnivel, que se construye en la rotonda del bulevar Juan Pablo II, en Tegucigalpa, va tomando forma al presentar un avance del 45 por ciento y se espera que esta importante obra de infraestructura esté terminada en noviembre. La vía ayudará a mejorar el flujo vehicular en esa zona de la ciudad, pues se calcula que por el sector circulan a diario unos 15,000 vehículos, pero con este proyecto habrá mayor movilidad, tanto en el paso como en sus alrededores.
En la obra se invertirán más de 74 millones de lempiras financiados con impuestos municipales. La estructura consiste en un puente elevado de 195 metros de longitud, con orientación norte-sur. Iniciará en la parte sur del bulevar Resistencia Popular y finalizará en el sector norte de la avenida Juan Manuel Gálvez.
Por el paso a desnivel se desplazarán los automóviles que se dirigen del sector de la colonia Alameda hacia el bulevar Resistencia Popular y los que transiten en sentido contrario, lo que ayudará a descongestionar ese punto de Tegucigalpa, ya que el redondel quedará en desuso.
Las autoridades de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) informaron que se ha estado trabajando en la construcción de muros de concreto, relleno y la fundición de parapetos en los estribos. De igual manera, la instalación de postes de alumbrado eléctrico de 45 pies, finalización de columnas en las siete pilastras, armado de acero y fundición, entre otras labores requeridas en su edificación.
El puente contará con señalización, tanto horizontal como vertical, y su respectiva iluminación, entre otras obras complementarias. El avance y finalización de este proyecto es clave para mejorar la movilidad urbana y reducir la congestión vehicular en la zona. Con el avance actual, la ciudad se acerca a un paso firme hacia una infraestructura más moderna y eficiente.