Hoy recordamos expresiones tan cotidianas que usamos, como, por ejemplo, cuando hay sol y llueve, nunca falta quien dice que “Está pariendo la venada” o “Se está peinando la virgen”. ¿Y por qué recordamos esto? Porque el 14 de julio es el Día de la Hondureñidad.
Un 14 de julio, pero 1969, fue la guerra entre Honduras y El Salvador, más allá de hablar sobre ese conflicto, la fecha sirve para reavivar las costumbres nacionales, al igual que las tradiciones que poseemos los hondureños.
Y es que es bien “macizo” ser catracho, tenemos una gastronomía que no tiene nada que envidiar a otro país, con las deliciosas baleadas, el pollo chuco, los ticucos, el casabe, los ticucos, las torrejas, el pan de coco, la ciruela o el mango en miel, los pilones (o paletas), los topogigios (o charamuscas), entre otros.
Además de eso, nuestra jerga es bien amplia, como vimos al inicio, esa impresión que es tan única del hondureño al momento de ver lluvia y sol al mismo tiempo. Pero hay gente a la que “no le cae el 20” de lo “fresa” que es nacer en este país, que aunque andemos “hules”, siempre nuestro ánimo está por arriba, así lo dejas ver con los “aleros” con los que te ves.
Entre otras expresiones que tenemos está el de cuando ya se va a dormir, “hay que meter la nica”, o cuando alguien sin intención se para en nuestro pie procedemos a decir “parate en Olancho que es más ancho” y hay muchas más.
Por otro lado, contamos con destinos muy hermosos, en cada uno de los 18 departamentos, teniendo playas, bosques, cascadas, ríos y también ruinas de civilizaciones pasadas, donde destaca más la maya con sus Ruinas de Copán.
Así que, vos “maje” sentíte orgulloso de haber nacido en esta tierra cinco estrellas.