La sombra del descenso hacía varios años que le llegaba a los arroceros, pero siempre lograban zafarse de él, sin embargo, en esta ocasión no logró hacerlo y luego de ocho años estando en primera división, vuelve a la segunda división del fútbol hondureño.
El drama del descenso se vivió el pasado domingo en la ciudad de El Progreso con un estadio que lució abarrotado por la gente que se ilusionaba con ver un año más a su equipo en primera. Y no era para menos, venían de ganar en Tocoa 1-2, un resultado que daba una gran ventaja por el cierre en casa.
No obstante, las cosas no le salieron para el equipo dirigido por Jhon Jairo López, que se cayó en los últimos minutos del encuentro, yendo a recoger por primera vez el balón de adentro del arco que defendían al minuto 53′ de partido, marcador que enviaba todo a tiempos extras con el gol de Jefferson Collazos.
Y como dicen, ‘camarón que se duerme se lo lleva la corriente’. ¿Se acuerdan de Diego Reyes, exolimpia? Él mismo se puso la capa de héroe y al 93′ mandó el balón al fondo de la red para sentenciar el tema y dejar a la Real Sociedad en primera. Curiosamente, quedará como anécdota que el técnico Mauro Reyes salvó al equipo pese a que en enero sufrió una agresión física del hermano del presidente del club.
El recuerdo de ellos quedará en todos los que amamos el fútbol hondureño porque son el último campeón fuera de los cuatro grandes, hazaña que hizo en 2015. De este modo, los progreseños verán al Platense, Social Sol, Parillas One, Atlético Choloma y Real Juventud, algunos de los equipos que han descendido en los últimos 13 años.
Actualmente, están en cuartos de final los escualos (Platense) que sueñan con volver a ascender, al igual que la Real Juventud, Boca Juniors, Independiente, Inter de Choluteca, Genesis, Oro Verde y Juticalpa, campeón que busca el ascenso de forma directa ganado el actual torneo clausura.