El mes de abril es una representación de la etnia garífuna, y son muchas las curiosidades que como hondureños nos da por saber. En esta entrevista tuvimos la oportunidad de platicar con Massay Crisanto, una joven de 27 años, abogada con especialidad en Comercio Internacional, graduada del Centro Universitario Tecnológico (Ceutec), embajadora y modelo.
Crisanto es nacida en la ciudad capital de Honduras, pero su papá es de la comunidad garífuna de San Juan, en Tela, y su mamá es de San Ignacio. Massay se presentó con una actitud positiva y, de igual manera, con una confianza en sí misma para responder todas las preguntas que se abordarían. “Yo me autoidentifico como una mujer negra y una mujer garífuna”, expresó Massay al inicio de la entrevista.
Crisanto de primera nos hizo saber de su trayectoria, a lo que ella nos respondió “yo voy a ser embajadora de la cultura hasta que me muera, comencé a trabajar en el Centro de la Cultura Garífuna a los 17 años, lo hice por una situación de estar cerca de mi papá, pero al año me enamoré de mi cultura”.
Massay nos relató que ella comenzó en el mundo de las pasarelas, pero que todo esto era con el propósito de dejar un legado sobre su cultura y lo que la identifica a ella. “Comencé a ser modelo como una parte de autoconfianza, ¿no?”, expresó.
“El cabello afro fue un arma mía para mostrar dentro de las pasarelas que las mujeres negras también tienen un espacio, que son muy hermosas y que vivimos en un país multicultural y con mucha diversidad. Por eso fui pionera en poner mi cabello afro como marca personal en las pasarelas”, detalló Massay.
Asimismo, nos interesamos en conocer qué se encuentra haciendo actualmente con su vida personal y profesional, nos explicó que no tiene proyectos por los momentos, pero nos respondió lo siguiente “ahorita me encuentro preparándome y aprendiendo más sobre mi carrera y sobre mi labor en la secretaría, pero no descartes alguna posibilidad porque pueda que sí”.
Durante la entrevista, Crisanto nos detalló qué significa para ella la cultura garífuna, y ella orgullosamente lo describió de la siguiente manera. “En Honduras carecemos mucho de identidad nacional. Para mí la cultura garífuna es identidad, es historia y al final, es todo lo que yo soy”.
La entrevista fluía de la mejor manera, Massay con seguridad respondía todo y hacía del momento una plática amena, nos hizo entrar en confianza, por lo que no pudimos dejar por fuera el conocer un poco más sobre su vida personal y amorosa.
¿Cómo le va a Massay en el amor?
“¿Por qué hacen preguntas tan difíciles?”, agregó entre risas. “Estoy enamorada por primera vez, te puedo decir que encontré al amor de mi vida, no estoy soltera y ya somos novios, y ahí vamos en el camino”, concluyó.
Y es que, con una alegría y una sonrisa, nos dio a saber que se encuentra felizmente viviendo esta etapa en su vida junto a su novio que es “chapín”, hermano guatemalteco. “Hemos encontrado amarnos desde la individualidad, desde la libertad, desde lo que somos los dos, desde nuestras diferencias, porque somos dos pueblos opuestos en cierta manera, pero nos complementamos superbién, o sea, ahorita puedo decirte que estamos superbién”, agregó.
Crecimiento personal y orgullo de su identidad nacional
Nos adentramos un poco más en la vida de Massay en cuanto a su experiencia por su cultura garífuna, ella nos dio la confianza de contarnos sobre su infancia y lo duro que fue a causa del racismo. “Yo me di cuenta de que era negra cuando tenía cinco años, estaba en preparatoria, pasó un incidente y todos me empezaron a gritar “negra”. Cuando yo le conté a mi mamá yo no entendía el porqué, yo se lo preguntaba llorando y ella me dijo que “Dios hace a las personas como a las flores, de diferentes colores y de diferentes formas y al igual que somos bellas”, pero igual yo no pude sobrepasar eso”.
Massay nos comentó que a los 17 años entró al Centro de la Cultura Garífuna y la conllevó a tener una fuerte pelea con su papá debido a que ella no le gustaba tomar los ensayos del baile garífuna. “Me dijo “nunca vas a poder ser o sentirte orgullosa de quién sos, ni vas a poder representar la cultura garífuna de manera digna”, expresó.
Ese momento fue lo que hizo cambiar su forma de pensar, a sentirse orgullosa de quién realmente es. “Comencé a aprender más de la cultura, a sentirme más orgullosa de lo que soy y a decir que mi piel cuenta una historia que necesita ser contada”, relató Massay.
Asimismo, nos comentó sobre el apoyo que ella recibe por parte de sus amistades, puesto que han sabido como hacerla sentir orgullosa. “Mis amistades son personas que me apoyan, que han estado en mis peores momentos, que han estado también en mi desarrollo personal, como una mujer negra, como una mujer garífuna. Estoy feliz de las amistades que tengo, y sé que son una bendición de Dios”.
¿Qué planes a futuro tiene?
“Pues… mirá, estar más vieja, obviamente”, agregó entre risas. “Siempre van a ser los planes de Dios y no los míos, y siempre ha sido así. Principalmente, voy por mi maestría, quiero viajar, quiero seguir preparándome, representar a mi país como mujer garífuna, por ahora esos son los planes a corto plazo, siempre un plan para toda la vida va a ser hacer sentir orgullosos a mis papas”.
Massay nos hizo mención que tiene planes de volver a reactivar su página web “Life as a Criolla by Massay”, que es una combinación de la cultura mestiza por parte de su mamá y la cultura garífuna por su papá.
Crisanto nuevamente nos comentó qué es la cultura garífuna. “Es la historia de personas que luchan, que resisten, que ríen, que lloran, que cantan y que aun así todos los días se levantan amando sus tradiciones, sus costumbres, tocando sus tambores, y creyendo que pueden pasar muchas cosas, pero mantener la cultura garífuna es lo que los mantiene vivos y les da esperanza de alguna forma”, expresó.
Massay le dejó un mensaje a todas esas mujeres que día con día viven con la realidad de aceptarse tal y como son y que luchan fervientemente. “Todas las mujeres somos bellas y únicas. Nada es fácil, tienen que trabajar, que hay días difíciles, cuando ustedes vean que el camino es fácil, por ahí no es, no va a valer la pena para nada. También sean ustedes mismas, aprendan a ser un agente de cambio”, concluyó.
Asimismo, Massay se tomó el tiempo para dejarles un consejo a la población hondureña para que conozcan más sobre la cultura garífuna. “Principalmente que, los garífunas no solo somos punta, que hay más bailes y danzas dentro de la cultura”, detalló.
“No solo se acuerden de los garífunas en las vacaciones, o cuando quieran bailar punta, que se acuerden de los garífunas cuando violentan sus derechos, cuando les quieren quitar sus tierras, cuando se les trata mal en un espacio por el simple hecho de ser una persona negra, que conozcan la cultura que eso les dará más identidad, y que si van a estar con la cultura garífuna que también estén en las malas”, concluyó.
Massay Crisanto nos detalló que se caracteriza como una mujer irreverente, porque es una persona sin filtros y que siempre es honesta cuando habla, apasionada, pero una cualidad que la hace destacar es su carisma, su manera de ser nos dio a entender que realmente se siente orgullosa de su identidad y de todo lo que ha logrado conseguir.