Justo en la entrada de este pueblo, que ha sido nombrado como el pueblo de los encantos, se encuentra este lugar que ofrece una experiencia de comida típica, como carnes asadas, en ambiente natural, con mesas al aire libre, rodeados por plantas y flores.
Julio Torres es la persona encargada de este restaurante, y la inspiración del nombre. Nos explica que quería dejar en especificar que el restaurante iba a estar bajo su influencia, siendo el encargado de la elaboración del menú y sus platos, dado que ya se había hecho de renombre en la escena gastronómica en valle.
Antes de tomar la decisión de abrir su propia local de comida, él trabajó como cocinero en un reconocido restaurante de Valle de Ángeles. Describió que se había llegado a un punto en que el entorno laboral no era completamente positivo. Cuando finalmente eligió dejar su puesto de cocinero, se le ofreció la oportunidad de tener acceso a un espacio y montar su propio negocio de experiencias gastronómicas.
Torres nos relata que tuvo una afinidad por la cocina desde que era un niño. Su familia ya incursionaba en el negocio de abarroterías, sin embargo, él tenía la determinación de estudiar gastronomía, por lo que tomó cursos de cocina. Así fue como laboró como chef, se hizo de su nombre y finalmente, apertura Restaurante de Julio el 1 de mayo de 2016.
Antes de poder abrir el negocio como tal, Julio describe como él, con la ayuda de su hermana Carolina, hizo restauración y mantenimiento de este espacio abierto, que ahora contiene pequeñas terrazas con techos de tejas, que aloja mesas; un área de juegos infantiles, un vivero donde los clientes pueden obtener las planta que se aprecian y adornan el espacio, y un amplio parqueo.
Entre las mejoras y una de sus principales curiosidades, es el “fogón” en el que una joven amasa y tira las tortillas en el comal, con un fuego alimentado con leña. Los visitantes pueden acercarse y tomar una tortilla, prepararla con frijoles refritos y queso fresco rallado, como un bocadillo mientras espera su plato principal. En su menú ofrecen desayunos y café acompañado por rosquillas, carnes asadas y platos tradicionales hondureños, y otras preparaciones como alitas y hamburguesas.
Aunque describe el restaurante, inicialmente el lugar era poco frecuentado, se sostuvo con eventos celebrados en el espacio del restaurante. Es que, además, ellos ofrecen sus servicios de celebraciones como bodas, graduaciones, cumpleaños y otros. Hoy en día, esta esquina de sabor en Valle de Ángeles, se mantiene a casi su total capacidad de manera regular, y cuentan con un equipo de calidad que esperan atenderlos de la mejor manera.
¿Qué expectativas tiene para sus visitantes? “Que se vayan con la satisfacción de que el comensal salga contento por la comida, por el lugar y la atención. Porque todo va de la mano”, expresó Torres. Descrito por Julio, como un lugar de ambiente familiar, rodeados de plantas y bajo la sombra de frondosos árboles, invita a los visitantes del resto del país y extranjeros, a tener un momento ameno, perfecto para “dominguear”, día en el que ofrecen música en vivo. Si deseas más información, síguelos en su página oficial de Facebook, como “El Restaurante de Julio”.