Fiesta, jolgorio, party o chojín, no importa como ustedes le digan, el sentimiento es el mismo. Hoy les daremos a conocer un colorido emprendimiento que está tomando más auge en la capital.
Ojo, para emprender no hay edad, y cuando se quiere, se puede. Camila Díaz del Valle, a su corta edad, se lanzó al mundo del emprendimiento, y junto a la ayuda de sus familiares ha ido subiendo peldaños y dándose a conocer en diferentes rubros.
“El Chojín”, nació en 2020, así como otros emprendimientos debido a la pandemia. Como en muchos hogares, la economía se vio afectada, es por eso, que, Camila se atrevió y quiso innovar en su modelo de negocio.
Con cajas sorpresas para el día del niño, el negocio sin querer queriendo, como se dice popularmente, fue tomando forma, gracias al empeño que pusieron al inicio del proyecto.
El Chojin es una tienda virtual, encargada de vender todo tipo de decoraciones, dulces y arreglos, para regalar en festividades, de igual manera, se encarga de decorar y dar vida a diferente tipo de eventos que se llevan a cabo en varias etapas del año.
“Actualmente, El Chojín es tienda que se dedica, desde hacer regalos, hasta decorar grandes eventos, y decoración de globos. La técnica que empleo es decoración de globos orgánicos”, confirmó Camila.
¿Qué tan difícil fue emprender?
“Fue totalmente un reto, porque lo inicié cuando tenía 18 años, entonces no tenía acceso a muchas cosas. Tuve varias limitantes, desde la patente de mi marca, porque no la podía registrar, porque no tenía 21 años”, confeso.
Asimismo, nos dio a conocer que, en ocasiones, ser joven es una limitante, ya que las personas piensan que los jóvenes no pueden encarar este tipo de retos y salir adelante con sus microempresas.
¿Cómo nació el nombre “El Chojín”?
“El nombre se lo puso mi mamá. Yo quería buscar un nombre que quedará en la mente de las personas. El Chojín es empleado por personas adultas, siendo un sinónimo de salir de fiesta y pasarla bien”, relató.
Para todos aquellas personas que quieran contratar sus servicios o quieran adquirir o consultar por sus diversos productos, deben de hacerlo con anticipación, para poder buscar y brindarles productos de calidad.
Si es un evento grande, tiene que ser de 5 a 6 días de anticipación, o más si es posible, para obsequios más pequeños dos días antes, si son personalizados, y si es del catálogo tiene que ser un día de anticipación.
¿Quiénes más se han convertido en parte del Chojín durante esta etapa de emprendimiento?
“Mi familia; mi mamá desde amarrar los globos, mi hermanita con el tema de logística y mi papá ya se está haciendo experto en poner chongos al final cuando vamos hacía un evento a decorar, nos trasladamos todos, como familia”.
¿Qué les dirías a aquellas personas que quieren emprender, pero tienen miedo de arriesgarse?
“Que se arriesguen y sigan adelante. A nosotros, como jóvenes, nos podría dar miedo, pero en el transcurso del camino, habrá personas que nos apoyen en todo el transcurso y nos den buenos comentarios por lo que estamos haciendo”.
A futuro a Camila ya sueña en grande, y le gustaría tener un espacio en físico, para que los clientes puedan visitar su local y llevar una experiencia totalmente diferente de todos los productos que puede ofrecer.
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Todos aquellos que quieran ver el trabajo que realiza esta joven soñadora, pueden seguirla en sus redes sociales como El Chojín, para que puedan contratar sus servicios y ver todos los productos que ofrece, y más en esta temporada navideña.
