En RadioHouse siempre tenemos visita de invitados destacados, esta vez, nuestro elenco se honró en compartir con un hondureño que puso en lo más alto la bandera de Honduras, el alpinista, Ronald Quintero, primer catracho en alcanzar la cima del Monte Everest.
Originario de Intibucá, el catracho actualmente reside en California, Estados Unidos, les comentaba a nuestros compañeros que gracias a una revista que lo cautivó por su portada cuando era un adolescente, fue lo que motivó a investigar y empaparse de información del alpinismo y fue así como encontró esa pasión y el deseo de poner la bandera de Honduras en la cima del mundo.
Un 12 de mayo del año 2022, a las 4:33 p.m. hora de Nepal, o sea, a las 4:48 a.m. de Honduras, logró lo que muy pocos seres humanos han logrado, conquistar el pináculo del mundo.
Pero, ¿qué es el pináculo del mundo?
“El punto terrestre más alto que ustedes se puedan imaginar, ya de eso no hay más, hay que pensar en un viaje a la Luna”, nos explicaba con mucho orgullo Ronald Quintero
¿Cuánto tiempo duró desde que iniciaste hasta que llegaste?
“La muy expedición duro 38 días, desde el inicio que dimos desde el trecking hacia campamento base, el muy asenso y muy descenso nos tomó cinco días”
Usualmente, tienen una duración de 60 días, ya que se necesita ir practicando escalada en hielo, a su vez que es necesario acostumbrar el cuerpo a las temperaturas y altura que tiene el campamento base y los demás campamentos.
Una expedición, que es el término correcto para utilizar debido a la cantidad de días de duración, al comienzo estaba conformada por 4 personas de diferentes países, entre ellos Ronald, se vio reducida cuándo llegaron a campamento base, a unos 5,300 metros, ya que, uno de los integrantes de la expedición decidió no continuar por fatiga, Ronald mencionó que su compañero no podía dormir y eso pudo provocar que se rindiera.
Entonces, ¿qué porcentaje le das en la parte física que te preparas y en la parte psicológica?
“Tiene que ser un cien y cien de cada una, puedes estar en las condiciones físicas más fuertes, pero si no tenes ese componente mental, estás dejando un margen de fracaso”
Ronald se había guardado el querer lograr un récord centroamericano, la considerada Travesía Imposible, que consiste en subir 2 de las cumbres más altas en una sola expedición, en este caso el punto más alto y el cuarto punto más alto, lo que pone el nombre de Honduras a otra altura, literalmente.
Las temperaturas durante la expedición eran tan bajas que dos de sus cámaras terminaron congeladas y no funcionaron al momento de tocar la cumbre.
¿Qué es más difícil, subir o bajar?
“Para mí es más difícil bajar, es más técnicamente retador, es cuando tienden a pasar más accidentes En esta parte de la entrevista se refirieron un poco a esa parte más difícil, los miedos y aquello que te puede hacer arrepentirte y renunciar.
¿Viviste alguna avalancha?
“Una noche conté ocho avalanchas”, añadió que produce mucha ansiedad, que no te permite dormir, porque después de escuchar esos estruendos da miedo.
Ahora podemos entender un poco mejor, lo que pudo provocar que aquel integrante de la expedición decidiera retirarse y no continuar con el ascenso a la cima del planeta.
¿Encontraron el cadáver de algún alpinista?
“Entre lapso de campamento uno y campamento dos, el día que nosotros emprendimos para el ascenso, nos sorprendimos de como un helicóptero aterrizó de emergencia a recoger el cuerpo de un ruso que había colapsado de fatiga”.
Pero este no fue el único cadáver que encontraría la expedición, a 150 metros de alcanzar la cumbre, ya cuando Ronald pensaba y se motivaba para seguir adelante, encontró el cuerpo de otro alpinista que yace desde hace mucho tiempo en esa zona.
“El último disturbio mental, que cuando terminas de pasar los pasos de Hillary, encuentro el tercer cuerpo que yo vi, el cuerpo de un escalador canadiense y lo que te disturba más la mente es que está envuelto en la bandera de Canadá, en ese momento te entra esa sensación de decir, ¡carajo!, aquí estoy, traigo mi preciada bandera en mi mochila, que con honor la quiero exhibir, pero ahí tenés el otro resultado de lo que puede suceder si las cosas no se dan a tu favor”
Es lo que expresó Ronald sobre esos miedos que te pueden perturbar durante la escalada y más en un punto tan critico como la cima, que es en realidad la mitad del viaje.
Superado este miedo y pruebas tan difíciles, ya en la cima, le preguntamos a Ronald:
¿Cómo te sentiste al momento de llegar a la cima?
“Una avalancha de emociones, no te voy a negar, lloré, salieron lágrimas, porque sentís la satisfacción de todo tu esfuerzo, pensás en los 10 años que estabas tratando de impulsar este proyecto, todos los entrenamientos, en tu familia, en la gente que te ha apoyado y a la vez te sentís con esa satisfacción de que todos los hondureños que me han acompañado hasta acá pueden decir que han tocado la cumbre”.
Ya para la recta final, Ronald, que está buscando cumplir el reto de “Las 7 cumbres”, que comprenden las cumbres más altas repartidas por todo el planeta, el catracho ya cuenta con cinco de ellas, Monte Denali, la montaña más grande de Norteamérica; Kilimanjaro, el techo de África; el monte Elbrús, el punto más alto en Rusia; el monte Aconcagua, el punto más alto de Sudamérica y finalmente su más reciente conquista, el monte Everest.
Mencionó que aún le faltan dos cumbres por conquistar, la pirámide de Carstenz, considerado el techo de Oceanía, y su próximo reto, el Macizo Vinson, ubicado en Antártida. Este será su siguiente reto y asegura que ya trabaja para emprender la primera expedición polar hondureña.
Sin duda alguna, el catracho es un orgullo nacional que cada vez pone más en alto el nombre de Honduras, remarcó en una de sus conferencias que tenemos que remarcar siempre lo positivo y no pensar o resaltar lo negativo que pasa. A continuación te dejamos la entrevista completa para que conozcas más detalles de la historia de este catracho.