Mantener un cabello sano y bonito, en muchas ocasiones resulta muy difícil debido a que a diario se enfrentan muchos factores externos que lo dañan rápidamente y más ahorita que el invierno está próximo a llegar. El trabajo es doble, es por ello, que para ayudarte a cuidar siempre de tu cuero cabelludo, te traemos excelentes consejos fáciles de aplicar para que este año, el invierno no maltrate tu melena.
Consejos
Menos frizz y más brillo
Es importante tener presente que siempre se debe desenredar mientras está húmedo. Uno de los consejos más recomendados es el uso de agua fría, esto contribuye a evitar que se genere frizz, aparte de aportar mucho brillo. El agua tibia no es mala, sin embargo, se recomienda lavarlo durante poco tiempo con calor y el último enjaguarlo con temperaturas bajas.
No acostarte con el cabello húmedo
Otro elemento también a tomar en cuenta es evitar dormir con el pelo mojado, debido a que se daña la cutícula del cuero cabelludo y comienzan a surgir ciertas irritaciones que se vuelven incómodas. También es importante cortar las puntas como mínimo cada dos meses, de esta manera crecerá más rápido.
¿Lavarte el pelo a diario es malo?
Tenemos que tener presente también que muchas personas consideran que es malo lavarlo con frecuencia y todo depende de si utilizas o no los productos adecuados para tu tipo de pelo. Existen una gran cantidad de tipos de cabellos y no quiere decir que todos necesitan ser lavados con la misma frecuencia y la misma intensidad. Lo recomendado es usar tratamientos que se adapten a las necesidades de tu pelo.
No usar accesorios de hule
Por otro lado, hay muchas personas que prefieren andar la melena agarrada con accesorios de hule la mayor parte del tiempo y esto no es bueno, debido a que al retirarlos puede provocar que las puntas se revienten, por lo que se aconseja agarrarlo con colas de material suave.
Evitar el calor a diario en temperaturas altas
De igual forma, se debe prevenir el usar la plancha para pelo o secadora a diario y más si todo el tiempo se mantiene en temperaturas altas. Lo mejor es utilizar estos elementos dos veces a la semana a una temperatura baja o moderada, y si se puede antes de iniciar el proceso, colocar en el cabello un protector para el calor.
Así que ya sabes, lo permitas que tu cabello hable por ti. Preocúpate de él no solo por imagen e higiene, sino para evitar problemas en el futuro, tales como la pronta aparición de canas y caída del mismo.