Honduras es un país lleno de historias por contar, tantos acontecimientos que se suscitaron, antes y durante la adquisición de nuestra anhelada independencia. Este año, nuestra nación cumplió su Bicentenario de Independencia, siendo 200 años de crear historia y sin duda, una de las mejores formas de conmemorar esta fecha importante y especial, es recordando una de las muchas obras arquitectónicas, en este caso nos enfocaremos en una que se encuentra en la capital, el Castillo Bellucci.
Esta construcción es una inspiración italiana, que es parte de la fascinante historia de Tegucigalpa, la cual se encuentra ubicada entre el barrio La Ronda y La Leona. En el lugar fue donde el italiano Alberto Bellucci, decidió formar su casa. Según cuentan, el sitio le recordaba a Italia por la magnífica vista que le acompañaba.
Alberto Bellucci en compañía de Augusto Bressani y Giovanni Belli fijaron su estilo italiano en este antiguo barrio, mismo que antes era conocido como Berlín. El castillo fue creado en los años cuarenta, y para la sociedad, era catalogado como un gran atractivo.
Para el desarrollo de esta obra se utilizaron diversos tipos de piedra caliza, material que era muy común en aquella época. El paso de los años ha dejado sus huellas en este palacio fortificado, el cual hoy funciona como un lugar turístico para conocer en el centro de la ciudad.
Su estructura era compuesta por columnas talladas, puertas y ventanas en arco, un diminuto torreón y paredes de piedra de diferentes canteras, las cuales daban vida al castillo capitalino del profesional Bellucci.
Varios vecinos afirman, según testimonio de sus parientes de muchos años atrás, que la obra incluía una elegante y preciosa escalera de espiral y, así como los castillos medievales, un puente levadizo decorativo.
¿Cómo surge?
Esto se comienza crecer cuando el italiano Alberto, arriba en Honduras durante el año 1914 por el puerto de Amapala, junto al arquitecto Giovanni Belli y del geómetra Augusto Bressani, que tiempo después contribuyeron a formar su anhelado castillo.
El palacio posee estilos europeos, completamente diferentes al barroco español, según historiadores. Bellucci trae con él una nueva moda de arquitectura italiana, un diseño urbano y un estilo arquitectónico.
Un dato importante a destacar es que no solo el Castillo Bellucci contaba con ese impresionante toque italiano, durante la misma década, se construyeron diferentes edificios públicos como la Alcaldía Municipal del Distrito Central, Hondutel, Casa Quinchón, entre otros inmuebles. Esta construcción, sin duda, es un tesoro que poseemos los capitalinos.
Por otro lado, Eduardo Bähr, un escritor hondureño, describe al Castillo Bellucci como una ensoñación de un loco y noble arquitecto italiano que haló piedra por piedra con la tenacidad de un poseso, tal vez con la idea de poblarlo de fantasmas de vírgenes de Boticelli.
Actualmente, el barrio la Leona, que anteriormente era llamado el barrio Berlín, es catalogado como un antiguo tesoro de la capital, siendo una de las zonas más preciosas de Tegucigalpa por su espléndida vista a gran parte de la ciudad y por sus edificaciones. Hoy quisimos recordar este rincón de la ciudad por estar cumpliendo 443 años de fundación. Si no conocés el castillo, puedes ir, el acceso es completamente gratuito.