Los hondureños día a día destacan en el extranjero, poniendo así el nombre de nuestro país en lo más alto, dando de qué hablar positivamente, enriqueciendo el talento nacional y dando a demostrar que hay muchas más cosas positivas que destacar.
En esta ocasión, tuvimos la oportunidad de platicar con el fotógrafo hondureño, Marcio Sánchez, quien trabaja para The Associated Press (AP) en los Estados Unidos y entre las fotografías premiadas en los Pulitzer, una de ellas fue capturada por el lente de Marcio, logrando así ser el primer hondureño que se hace de esta distinguida obtención cuando logró inmortalizar un dramático momento en la ciudad de Portland, Oregon, durante unos disturbios raciales por la muerte en 2020 de George Floyd.
El hondureño nos contaba que reside en los Estados Unidos desde 1983, cuando su padre los llevó porque aquí tenía a su familia y querían estar juntos, y por ello, allá contaban con mucho apoyo por parte de su familia paterna y así fue como lograron emigrar todos juntos para empezar una nueva vida.
“Empezó en High School, una maestra de inglés nos pidió una escritura, acerca de una carrera que encontráramos, algo que nos gustara, y a mí me gustaba escribir y tomar foto, entonces cuando investigué que existía una carrera que se llamaba fotoperiodismo, no lo dudé y me metí de lleno”, nos comentaba al momento de preguntarle cuándo se dio cuenta que quería dedicarse a la fotografía profesionalmente.
Todo niño tiene una inspiración al momento de decidir el camino, y él no fue la excepción. Marcio nos expresó que él disfrutaba leer periódicos cuando se encontraba en Honduras, lo hacía por pasión, y percibía las mismas sensaciones cuando se fue a suelo americano donde leía diarios de su ciudad como Los Angeles Times. Él a ver a ciertos fotógrafos que salían en la portada del periódico diariamente, los seguía y admiraba a todos por su contenido, fotografías y escrituras.
¿Recuerda su primera cámara?
“Algo curioso acerca de eso, es que, la primera cámara que yo tuve me la obsequió mi hermano cuando le dije que iba a buscar una carrera en fotografía. Me dijo que eso sería mi regalo para que yo pudiera empezar mi carrera universitaria”, dijo.
El legionario nos detalló que él llegó a AP después de trabajar siete años con el periódico de Kansas City Star, donde recibió su primer empleo. Había un trabajo en la ciudad de San Francisco donde aplicó, llegó a la entrevista y lo aceptaron. Desde entonces, 15 años en San Francisco y otros tres en Los Ángeles, donde reside actualmente.
Hablando de la reconocida y premiada fotografía, se le preguntó sobre la historia detrás de la misma, en la cual nos explicaba que “ocurrió en la ciudad de Portland, Oregon, durante unos disturbios raciales por la muerte de George Floyd y ahí fue donde la capturé. Esa imagen que capturé en Portland, esa muchacha que estaba en la imagen se estaba agachando debajo de la pared porque estaban tirando gas lacrimógeno los agentes federales, entonces se agachó para protegerse del humo causado por el gas”, finalizó Marcio.
Después de la muerte de Floyd, estaba asignado para los disturbios raciales en su propia ciudad de Los Ángeles, pero en el estado de Oregon se había puesto violenta, entonces lo mandaron para allá. Las protestas en Portland estaban fuera del Palacio de Justicia, los manifestantes estaban rodeando el edificio cada noche y los agentes federales pusieron un muro de acero para separarse de los “revoltosos”.
¿Qué otros lugares le ha tocado recorrer con su trabajo?
“En realidad, de todo, dos Copas Mundiales, tres Juegos Olímpicos, huracanes, incendios forestales, las personas más importantes del país como los políticos y presidentes”.
Por último, nos confesó que no sabía que había sido el primer hondureño en ganar el premio Pulitzer, pero al final recibir premios, galardones y distinciones no es lo importante para él, sino el poder informar al público, pero eso no quitó que haya sido una gran sorpresa de la cual confesó nunca esperarse.
Asimismo, manifestó que llegar a ese punto como hondureño lo pone muy contento porque en su país natal fue donde aprendió a ser una buena persona, donde sus papás le enseñaron a trabajar duro y le da gracias a las escuelas a las que asistió en San Pedro Sula.