El cuarto día de la Eurocopa de Naciones ha tenido el regreso de una nación al torneo después de 25 años, posiblemente el mejor gol de torneo, la primera sorpresa y un grande que deja muchas dudas.
Todo empezó temprano con Escocia recibiendo a la República Checa en Hampden Park. Los escoceses regresaban a su primer torneo mayor desde el mundial de Francia 98 y su primera EURO desde 1996 y los checos llegaban a su séptima participación consecutiva.
Se jugó un partido reñido de ida y vuelta con oportunidades para ambas selecciones. Después de un tiro de esquina que se fue lejos hacia la banda derecha y luego fue recentrado, Patrik Schick anotaría de cabeza en Hampden Park para sellar el 1-0 al medio tiempo.
En la parte complementaria se daría lo que puede ser el mejor gol del torneo. Al 52 Escocia perdería la pelota tras un rechace de Tomás Soucek que Patrick Schick remataría desde la media cancha con mucha clase y mucha curva, así fulminando al arquero David Marshall.
El 2-0 sería definitivo, Escocia siguió insistiendo, pero no encontró el gol. No han podido encontrar la meta rival en cinco de sus últimos siete encuentros en el torneo. República Checa deja buenas sensaciones tras recibir una goleada por parte de Italia en su último partido preparatorio.
Más tarde tuvimos Polonia – Eslovaquia en San Petersburgo con Lewandowski como estrella a seguir. Los eslovacos sorprendieron al 18 tras una jugada versallesca de Robert Mak en la banda izquierda que definió al primer palo, pero terminaría siendo autogol de Szczesny, arquero de la Juventus, ya que el rebote impactó con su espalda.
Eslovaquia fue más durante el primer tiempo y se irían con la ventaja mínima al medio tiempo. Polonia no se quedaría de brazos cruzados y tras el descanso empató el cotejo por medio de Karol Linetty que aprovechó el rezago por izquierda que Lewandowski no pudo conectar y con la fuerza mínima evadió al guardameta eslovaco.
Al 62 Gregorz Krychowiak sería expulsado por doble amarilla y siete minutos después pagaría el precio mayor. Milan Skriniar, campeón con el Inter de Milán, remataría de manera violenta un rebote en el borde del área polaca tras un tiro de esquina. El 2-1 se terminaría consumando, los intentos polacos de empatar fueron inútiles, pero la expulsión les terminaría afectando todos sus esfuerzos.
Para cerrar una jornada más de este torneo, España sería local en Sevilla ante Suecia y era el partido que más prometía; lo irónico es que fue el más aburrido y de peor nivel.
España y Suecia cuentan con selecciones jóvenes, pero que militan en ligas importantes; aun así el partido estuvo plagado de errores y desaciertos en ambos lados. Ambos fallaron opciones claras de gol, la más memorable fue producto de Álvaro Morata que confirma su mal momento futbolístico.
A pesar de jugarse hasta el minuto 96 y tener oportunidades, nadie se hizo daño y se confirmó el primer 0-0 del torneo.
Mañana tendremos doble cartelera con los campeones liderados por Cristiano Ronaldo visitando a Hungría en Budapest y más tarde, el plato fuerte de toda la primera vuelta de la etapa de grupos, Francia – Alemania que promete mucho por los planteles que ambos presentan.
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