Han pasado un poco más de 13 meses desde que el planeta Tierra se paralizó debido a la pandemia causada por el COVID-19. Si bien es cierto que la mayoría de actividades se han ido reanudando de a poco, siempre hay algo que hace falta porque no estamos al 100% todavía.
Hace unos días mientras pasábamos por el Estadio Nacional de Tegucigalpa vimos el portón de la localidad de Silla abierto. Aunque todavía no se puede asistir a los partidos de Olimpia, Motagua y Lobos UPNFM, nos acercamos para verificar si lo que presentíamos estaba pasando, si era cierto y, efectivamente, las famosas Carnitas El Estadio estaban trabajando para gracia de todos los capitalinos y aficionados al fútbol.
Al acercarnos al portón, un señor nos atendió con una sonrisa en la cara y con toda la energía y ganas del mundo. Le preguntamos si estaba el dueño del negocio para poder realizar un reportaje y sonrió aún más y nos dijo: “Soy yo, claro que sí pueden. Pasen adelante sin pena”.
Lo primero que sentimos al entrar fue nostalgia. Nunca nos imaginamos que en algún momento de nuestras vidas nos íbamos a emocionar con solo ver el pasillo que conduce al sector de Silla del Estadio Nacional, se sintió como si nunca dejamos de asistir a los partidos de los equipos capitalinos.
Rápidamente, Manuel de Jesús Roque, propietario de “Carnitas El Estadio” nos llevó hacia el lugar donde prepara cada plato de comida para que pudiéramos presenciar el proceso que conlleva mientras nos contaba un poco de la reapertura de su negocio.
“Desde hace como unos 6 meses estamos de nuevo acá. La gente del Estadio Nacional nos dio la oportunidad para alquilar y poder abrir nuestro negocio. Gracias a Dios nosotros tenemos una clientela excelente, no le voy a decir que estamos al 100, pero estamos en un 70%”, manifestó Roque.
Manuel también reconoció que una parte importante de la clientela que tiene son los jugadores, entrenadores, utileros, periodistas y demás personas que están en el estadio trabajando en estos tiempos de liga sin acceso al público general.
“Nosotros trabajamos todos los días desde las 10 de la mañana hasta las 7 de la noche, sin feriado. Entonces hay veces que yo estoy sacando varios pedidos para que salgan las motos y yo ni me doy cuenta de quiénes más vienen. Directivos, jugadores, periodistas, montón de gente viene”, dijo el agradable propietario, mientras cortaba en cuadritos la carne, una característica de ellos.
Manuel también confesó tener unos 29 años de estar trabajando en el Estadio Nacional, pero no siempre estuvo con su negocio de carne asada. Empezó como muchos otros, vendiendo refrescos y después anduvo con una chiclera.
“A mí me dio trabajo el mero dueño del negocio de las carnitas del Estadio Nacional. Se llamaba Don Tony Oliva, por esas cosas de la vida se retiró y como yo anduve en la lucha con él. Después me dijo que me daba la oportunidad para que yo siguiera. Su legado quedó en mis manos”, expresó don Manuel.
Asegura que, así como él se encargó de llevar el legado de Tony, él luego pasará la batuta a sus hijos que desde ya ayudan con el negocio familiar. Su hija atiende el puesto ubicado en el Bulevar Morazán, específicamente en las canchitas de fútbol Pineda Chacón. Algunos no lo saben, pero no es nada nuevo, llevan unos 18 años operando ahí.
“Cuando yo quedé como jefe no se me hizo muy difícil porque solo seguí haciendo lo que Tony me había enseñado. Yo preparaba carne y otra gente lo ayuda a uno. De lo que sí me fui dando cuenta es que esto es una inversión y ahí fue donde estaba el verdadero reto”, mencionó luego de que se le preguntara cuáles fueron las complicaciones de darle seguimiento al negocio que heredó.
“Lo que yo trato es de mantener a mis clientes hasta donde pueda, porque sí, todo ha estado yendo para arriba (los costos)”. Actualmente, para gusto de todos, los precios se mantienen aún y cuando muchos comercios han decidido subirlos un poco a causa de la pandemia.
Confesó que siempre hay que ganar algo para mantener a flote su negocio, pero que a él lo que le llena de felicidad es tener a la clientela feliz, ya que son ellos quienes han hecho de Carnitas El Estadio un éxito.
La carne de res, cerdo o ya sea mixta cuesta 100 lempiras; hay un plato nuevo que cuesta 130 lempiras y trae dos chorizos. Nosotros podemos elegir si la deseamos con frijoles o “estilo estadio”, este último siendo la burrita envuelta en aluminio con chimichurri y chismol que disfrutábamos cuando estábamos en el sector de Silla o Somba viendo un partido de Liga Nacional.
Recuerden que también pueden hacer sus pedidos al 9748-0987 (Estadio Nacional) o 9615-9325 (Canchas Pineda Chacón). También pueden seguir sus páginas de Instagram y Facebook donde podrán hacer más consultas y estar al tanto de cualquier anuncio.
Las Carnitas El Estadio son una delicia, además de que con solo olerlas nos trae muchos recuerdos de aquellas tardes y noches inolvidables de fútbol.
¿Ya pidieron las suyas?