Unos 40 millones de dólares, aproximadamente mil millones de lempiras, necesita la Asociación de Productores de Banano Independientes del Valle de Sula para asegurar la siguiente cosecha que saldría al mercado en el primer semestre del próximo año 2022.
Lo primero que corre riesgo es la exportación del producto, ya que en el primer semestre del año se generan las ventas de la fruta en el mercado internacional. De igual manera la inversión serviría para subsanar los suelos de las fincas productoras, para reparar las carreteras dañadas, invertir en sistemas de riego y también en sacar la cosecha de las comunidades afectadas,
El proceso desde la siembra hasta la cosecha, conlleva a una inversión de tiempo de nueve meses. La producción bananera es uno de los principales cultivos de exportación que resultó afectada por el paso de las tormentas tropicales Eta e Iota”, manifestó el presidente de esa organización agrícola, Héctor Castro.
Muchos fueron los cultivos que se vieron afectados por el paso de las tormentas tropicales Eta e Iota. Castro advirtió que si Honduras no puede suplir al mercado internacional, otros países sí lo harán como Guatemala y Ecuador. Cabe mencionar que el sector bananero genera una gran cantidad de ingresos económicos y también es generador de empleos en el país.
La situación es compleja, ya que se debe actuar de inmediato y se debe invertir para garantizar la siguiente cosecha. De momento peligran cuatro mil empleos, pero la cifra podría aumentar si no se invierte en este sector, puntualizo el dirigente empresarial. En estos diez meses se exportaron 23,865.3 cajas de 40 libras, a un precio de 19.38 dólares generando unos 462.5 millones de dólares en divisas.
