Sin duda alguna, que después de estar por varios meses sin deportes, el regreso de las diferentes disciplinas fue un respiro para millones de personas. Los deportes más importantes; fútbol, basquetbol y béisbol, fueron los protagonistas en su regreso. Las finales de los últimos 2 antes mencionados, fueron de infarto, coronándose campeones 2 equipos de la misma ciudad (Dodgers y Lakers).
Dichos campeonatos trajeron consigo celebraciones en toda la ciudad. Miles de personas salieron a las calles, y debido a eso, muchos se han contagiado del virus. Autoridades dieron a conocer, que las diferentes fiestas llevadas a cabo en Los Ángeles, han provocado un rebrote del COVID-19, luego haber pasado el pico de casos en los meses pasados.
California, al igual que muchos otros estados de Estados Unidos, han reportado bajas significativas de contagios y decesos, lo cual ha permitido la reapertura de lugares públicos, como gimnasios y restaurantes, sin embargo, en Los Ángeles, el regreso a la normalidad ha sido más lento que otros condados debido a las diferentes actividades, entre ellas las celebraciones.
En estas reuniones se han ignorado recomendaciones como el uso de mascarilla y sana distancia. Asimismo, se han expuesto ante los constantes gritos de miles de personas sin cubrebocas, y en dichas fiestas no faltan los abrazos y el contacto con otras personas.
A principios de octubre, en Los Ángeles se reportaban 940 casos diarios, pero las cifras han aumentado a mil doscientos por día desde la semana pasada, según autoridades y medios de comunicación, la mayoría son personas menores de 40 años, un dato que se relaciona con los rangos de edad de aficionados que han salido a las calles a festejar los éxitos de Lakers y Dodgers.