El satélite centroamericano, Morazán, cada vez es una realidad. Esta semana, dicho proyecto recibió buenas noticias. La Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Ultraterrestre (UNOSSA) y la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) seleccionó al Proyecto Morazán como ganador de la quinta ronda del Programa de Cooperación entre las Naciones Unidas y Japón sobre el Despliegue de Cubesat del Módulo Experimental Japonés (Kibo) de la Estación Espacial Internacional (ISS) “KiboCUBE “.
Un equipo de profesionales, entre docentes y estudiantes de las facultades de Ingeniería y Ciencias Espaciales de la UNAH, con el aporte de la Universidad de San Carlos de Guatemala y la Universidad de Costa Rica, bajo el asesoramiento del Instituto Tecnológico de Kyutech, de Japón, entre otros cooperantes, están desarrollando este novedoso proyecto, que tiene como objetivo principal fabricar el satélite y enviarlo al espacio.
Nosotros hace un tiempo concursamos enuna ronda de financiamientos por 300 mil dólares, monto que significa que ya tenemos el boleto para poder colocar nuestro satélite en una operadora espacial, es decir en un cohete hacia la estación internacional espacial, a través de JAXA”, manifestó complacido Fernando Zorto, coordinador nacional de la iniciativa regional al diario Presencia Universitaria.
Morazán será un dispositivo nanosatelite en forma de cubo, que una vez esté en el espacio su misión será vigilar y monitorear los niveles hidrográficos de tres cuencas; Río Ulúa en Honduras, Río Salmá en Guatemala y el Río Matina en la zona boscosa en Costa Rica.
Para ello se colocará una serie de estaciones en tierra, esas estaciones estarán monitoreando una serie de variables atmosféricas y de altura de las cuencas que permitirán un sistema de alerta temprana para evitar desastres e inundaciones en las poblaciones que están a cercanías de las cuencas centroamericanas antes mencionadas.
La participación del Morazán-Sat en el “KiboCUBE “fue posible gracias al apoyo del Sistema de Integración Centroamericana (Sica), dado que se trata de una iniciativa regional encaminada a diseñar, construir y operar el primer satélite ejecutado por tres países de Centroamérica, y el primero en Honduras.
“Debemos sentirnos orgullosos como hondureños porque hemos logrado esta beca para poder colocar nuestro satélite en el espacio. Ahora lo que resta es construirlo y fabricar la infraestructura dentro de la Universidad para poder generar ese proceso”, manifestó Zorto.
Este proyecto es de suma importancia para la región centroamericana, ya que aparte de aportar a la investigación científica, también servirá como una fuente de aprendizaje para los estudiantes de la UNAH y de los colegios hondureños que estén interesados en saber de este tipo de proyectos. Para este proyecto trabajará un aproximado de 35 y 40 personas que se pasarán a la historia del país, por tan grande hazaña.