La economía de Honduras ha sido golpeada fuertemente por el COVID-19. El rubro del café no ha sido excepción y durante esta crisis cientos de personas han dejado de percibir sus ingresos, debido a que la pandemia había evitado que trabajara al cien por ciento en las distintas fincas cafetaleras que hay en el país.
A principios de esta semana caficultores de la Asociación de Productores Agrícolas Orgánicas de La Trinidad, Santa Bárbara, han confirmado que volverán a sus labores con las medidas de bioseguridad necesarias, para así salvaguardar la salud de todos sus trabajadores.
Autoridades hondureñas conocieron las normas de bioseguridad que se estarían aplicando en las próximas semanas en las cosechas de café. Autoridades de la zona y trabajadores del grano, manifestaron su satisfacción, ya que pronto volverán a realizar una de las labores que más les satisface.
Cabe señalar que este avance es de suma importancia, ya que Honduras es un país fértil en la producción de café, ocupa los puestos más altos a nivel mundial, siendo el mayor productor de América Central y el tercero de América Latina, siendo este grano uno de los ingresos más importantes para su economía.
Esta reapertura en los cafetales significa que más de 120 mil familias distribuidas en aproximadamente en 210 municipios y en 16 departamentos volverán a tener un ingreso. Es de suma importancia tener en cuenta que el café representa la segunda fuente de divisas, después de las remesas familiares.