El COVID-19 sigue afectando a los países del mundo. Varias naciones siguen luchando ante esta enfermedad, mientras que otras se vuelven a integrar a las actividades de la vida diaria. A pesar que las diversas vacunas aún están en proceso de estudio, no se pierde la esperanza que a finales de este año y a principios del 2021, se inicie el trabajo exhaustivo de inmunizar a toda la población del mundo.
Por mientras ese día llega, las alarmas se han encendido en varios países de Asia y Europa. Sistemas de salud de esos continentes, han confirmado pacientes reinfectados de COVID-19. Según especialistas, la reinfección requiere pruebas genéticas tanto en la primera, como en la segunda infección para ver si existen diferencias en el virus y varios pacientes nuevamente han dado positivo.
Médicos han confirmado que la reinfección no es sorprendente, pero es probable que sea poco común y se necesitan estudios más amplios para comprender por qué puede suceder esto. La confirmación de que puede haber reinfección del nuevo coronavirus aporta nuevos datos sobre la duración de la inmunidad, y entender esto tiene implicaciones en el desarrollo de una vacuna.
Los expertos consideran que las reinfecciones no son necesariamente graves, ya que los infectados desarrollan una respuesta inmunitaria a medida que sus cuerpos luchan contra el virus, lo que ayuda a protegerlos contra una crisis, pero todavía no está claro qué tan fuerte es esta protección o inmunidad, o cuánto tiempo dura.
Inmunidad innata y adaptiva
La inmunidad es el conjunto de mecanismos que protegen al ser humano de las infecciones y hay dos tipos:
Innata: Tan pronto detecta un invasor extraño en el cuerpo e incluye la liberación de químicos que causan inflamación y glóbulos blancos para destruir las células infectadas.
Adaptiva: Establece una respuesta específica frente al agente infeccioso en concreto. Incluye las células que producen anticuerpos dirigidos que pueden adherirse al virus para detenerlo y las células T, que pueden atacar solo a las células infectadas con el virus, lo que se denomina respuesta celular.
Esta respuesta adaptativa se demora varios días en llegar y uno de sus rasgos es que deja memoria. Es decir, recuerda los patógenos con los que tu cuerpo ha entrado en contacto en el pasado, y por ello sabrá cómo combatirlos en el futuro. Lo que los virólogos de todo el mundo tratan de determinar ahora es cuánto puede durar esa inmunidad para el COVID-19.
Latinoamérica ha comenzado a reapertura la economía, lo cual, ha venido a preocupar al sistema de salud, ya que las personas volverán a sus actividades diarias y pueden causar un rebrote de la enfermedad. Aunque ya haya padecido la enfermedad, una persona puede volver a contagiarse y volver a tener los síntomas, por eso es recomendable no bajar la guardia y mantener las medidas de bioseguridad necesarias en todo momento.