Elempira o comúnmente conocido como Lempira, es uno de los personajes más icónicos de nuestra historia, ya que este sirvió al país y resistió con mucha valentía ante los conquistadores españoles. El cacique defendió sus tierras, y a pesar de no tener un armamento avanzado como el de los enemigos, destacó por su gran inteligencia a la hora de realizar sus estrategias.
Cada 20 de julio se conmemora la vida y muerte de este personaje, el cual destacó por sus grandes hazañas y duras batallas por defender a su pueblo de la dominación española, y aún en la actualidad es considerado un héroe nacional por su gallardía al momento de defender el territorio de la dominación extranjera.
Cada año las instituciones académicas del país celebran esta fecha especial realizando actos cívicos, danzas folclóricas, degustación de comida típica y la famosa elección de la india bonita. Debido a lo que estamos viviendo, este año será diferente, pero no es excusa para recalcar en los niños y jóvenes la historia de uno de los próceres más importantes de Honduras.
Debido a la poca información que hay se han creado muchas versiones de quién fue, dónde se estableció y cómo murió Elempira. Siendo este el motivo principal, por el cual muchos hondureños han transmitido información errónea de generación en generación, causando confusión en gran parte de la ciudadanía. A continuación se detallan las historias más contadas sobre como fue que murió el cacique a manos de los españoles.
Historia tradicional de su muerte
Esta versión es la que más se enseña en las escuelas, donde explican que el cacique murió a traición. Se dice que este se encontraba en una negociación para llegar a una tregua y así evitar perder vidas humanas durante la lucha que era inminente, debido a que los españoles querían conquistar más tierras del territorio hondureño.
En este pacto, 2 hombres montados a caballos querían convencer a Elempira, cosa que no fue así, y este rechazó sus términos y uno de los de los españoles armado con un arcabuz le dispara a traición, él fallece y el ejército Español en campaña intenta derrotar la fortificación nuevamente.
Los Lencas se ven sorprendidos por el fallecimiento de su líder, algunos guerreros descienden de las montañas donde se habían establecido y buscan tras zonas aledañas para dar un contraataque mientras tanto otros que sirvieron al cacique se dan por vencido, quedando un grupo pequeño que a los pocos días también fue derrotado.
Versión de la Probanza de Méritos
Esta versión fue descubierta por el historiador hondureño Mario Felipe Martínez, la cual fue redactada en México en el año de 1558 por Rodrigo Ruíz, y que actualmente se encuentra en el Archivo General de Indias de Sevilla, lugar que se creó para centralizar la documentación referente a la administración de los territorios ultramarinos españoles.
En dicho documento, se refiere a los servicios de Rodrigo Ruíz en la conquista de Honduras con Francisco de Montejo, y afirma que el capitán “Lempira”, murió en combate con Ruíz en medio de un “guazábara” (batalla inesperada) y después, Ruiz le cortó la cabeza como prueba fehaciente de la muerte de Lempira.
“Y fui a la parte y lugar donde estaba animando a su gente el dicho capitán llamado Elempira, el que traía el vestido y las armas de los españoles que había matado y peleando con él, lo maté y le corte la cabeza para llevársela al general”, dicta parte del manuscrito fechado en México el 18 de enero de 1558.
Debido a su gran rebeldía y fuerza estratégica, el ahora prócer hondureño se convirtió en todo un problema para los conquistadores, es por eso, que su muerte iba a causar grandes ganancias a la persona que se adjudicara su asesinato, brindándole grandes ganancias monetarias y en extensión de tierras.
Hoy conmemoramos su nacimiento, muerte y rebeldía; siendo Elempira uno de los personajes más emblemáticos que tendrá Honduras, convirtiéndose en un ejemplo para las generaciones actuales, debido a su nobleza y entrega por proteger a su gente de la dominación extranjera.
