La National Football League (NFL), sigue buscando caminos “seguros” que le permitan regresar a sus actividades lo más pronto posible, mitigando en gran parte la facilidad de contagio que posee el coronavirus. Para ello la liga intentará implementar máscaras construidas de material quirúrgico en los cascos de los jugadores.
La NFL, como todas las competiciones deportivas ha venido bregando con todas las complicaciones de la pandemia, primero con las limitaciones que reprodujo sus efectos en la temporada baja, obligando al personal de campo continuar con sus actividades desde sus hogares, así también como la realización del Draft 2020, que por primera vez en su historia tuvo que ser desarrollado de forma virtual.
Para evitar más atrasos, ingenieros de la liga en colaboración con la marca asociada de la NFL, Oakley, han trabajado en la propuesta que hace principal énfasis en la modificación de los cascos de los jugadores, añadiendo una especie de máscara quirúrgica N95.
“Los bioingenieros están probando prototipos con Oakley. Están visualizando cualquier problema, incluido el empañamiento de las máscaras”, indicó Thon Mayer, Director médico de la NFLPA.
Mientras tanto las principales autoridades de la NFL, siguen manteniendo en pie el 10 de septiembre, como fecha tentativa para dar inicio a una temporada poco habitual, campaña que cuenta con el apoyo de estados como Texas, New York y California, para albergar una gran cantidad de encuentros sin fanáticos en los recintos deportivos.
