Seguramente eres de las personas que está siguiendo todas las medidas de bioseguridad establecidas para combatir la potente pandemia del coronavirus, pero quizás no estás poniendo completa atención a ciertos detalles que podrían arriesgarte a contraer esta peligrosa enfermedad.
Una medida que podría estarnos alejando de esa posibilidad de contraer el Coronavirus, es tener mas cuidado con los productos que compramos, si bien es cierto que en diferentes artículos de los medios de comunicación se ha dicho que el virus podría permanecer por muchas horas en objetos y superficies, hay quienes lo creen y hay quienes lo descartan.
Pero la interrogante es ¿pueden los alimentos, productos o empaques transmitir el virus del Covid-19 a un ser humano?, esta es una pregunta que tiene a todos pensado cada vez que regresan a casa de comprar sus alimentos para poder sobrevivir durante la cuarentena.
La verdad de todo esto, es que el virus sí puede permanecer en las superficies por muchísimas horas, así lo han confirmado varios estudios como el de la revista científica New England Journal of Medicine, sobre “el virus SARS-CoV-2, donde expresa que el virus puede llegar a mantener su capacidad infecciosa en un periodo desde un día completo hasta tres días.
Según información encontrada en el portal web del Centro de Control de Enfermedades CDC de EEUU se afirma que un individuo podría contraer le virus a través de un objeto o superficie si este después de tocarlos lleva sus manos a la boca, ojos, nariz u otras partes del cuerpo. Sin embargo mantienen las dudas que esta sea la causa principal para contraer el virus.
Los lugares encargados de producción o venta de alimentos y demás productos de consumo, trabajan bajo las medidas de bioseguridad establecidas, y lo hacen a través de guantes, mascarillas, desinfectantes y otras medidas sanitarias obligatorias. Trabajando así, no existiría riesgo alguno de contraer una enfermedad por el contacto con un producto.
Donde si podríamos contraer la enfermedad es mediante el consumo o la compra de productos elaborados por fabricas o laboratorios ilegales, porque a diferencias de los producidos por empresas y fabricas legales, es que estos no son auditados por un ente sanitario, por lo tanto, son un blanco perfecto para la propagación del virus.
Los productos ilegales son traficados por individuos criminales, por ende son productos clandestinos, dudosos y sucios que atentan contra la salud de muchos seres humanos. Productos que cuyos distribuidores no tienen como objetivo velar por la salud de los consumidores.
Es por eso, que como consumidores y personas honestas debemos exigir la venta y procesos de bioseguridad correspondiente a aquellas empresas que fabrican o distribuyen insumos, si queremos cuidar verdaderamente a los nuestros, debemos velar y asegurarnos que lo que estamos comprando o consumiendo haya pasado por un proceso estricto de vigilancia sanitaria.
Nuestro deber será no contribuir a ese circulo vicioso de contrabando, no comprar productos de dudosa procedencia, que lo único que buscan es librarse del pago de impuestos afectando así al Estado y dejando como resultado de una nación que no tendrá los recursos para combatir una crisis sanitaria como la que actualmente estamos viviendo.
“Debemos asegurarnos que los productos que consumimos cumplen con todos los requisitos de bioseguridad que nos garantizan la salud, el contrabando no lo hace. Protege tu vida y la de tu familia, no consumas contrabando”, expresó Fernando García, Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), organización empresarial que apela a la compra en centros autorizados.
