Juan Zambrano es un hondureño de oficio zapatero que se ha quedado al igual que muchos durante esta cuarentena sin su trabajo y sin sus clientes con los cuales lograba obtener el pan de cada día. El ocio lo ha llevado a darse la tarea de alimentar a las palomas que llegan a las plazas de La Catedral y Los Dolores en busca de unos cuantos trozos de comida.
En un vídeo realizado por la cadena Univisión, se puede ver a don Juan alimentando con mucho amor a estos animalitos que son símbolo de paz y esperanza para muchos.
Al parecer también lo son para Juan quien ha dicho desafiar al coronavirus, con tal de cumplirle a Dios el encargo de alimentar a las palomas de esta zonas de la capital que se han quedado sin alimentos en medio de la pandemia.
“Las aves son el mensaje de Dios que nos pongamos alerta” dice Juan mientras caminaba de prisa para alimentar a las palomas que se amontonaban en manadas con tan solo verlo venir.
“Les traigo agua, les traigo tomates, les he traído cocos, se los pico bien picaditos, pepinos maicillos y arroz” contó a la periodista de la cadena de televisión internacional.
Según cuenta Juan, él decidió tomar la tarea después de que se sintió guiado por una de estas palomas, en el momento pensó que alguien debía encargarse de alimentarlas en este tiempo donde no había nadie que les arrojará algo que comer. Luego de tener ese pensamiento dice haber escuchado una voz divina diciéndole “eres tu quien lo debe de hacer”.
Juan reside en una colonia marginal de la capital, se ha quedado sin empleo debido a que sus clientes a quienes lustraba los zapatos, se encuentran todos en casa. Actualmente se dedica a limpiar solares de la basura y lo muy poco que gana lo utiliza para alimentar a sus amigas las palomas.
La historia de este hombre nos deja un gran mensaje de esperanza y nobleza, por un lado en su corazón se refleja la fe de que un día todos saldremos de esta crisis y por el otro nos enseña a no olvidarnos de los animalitos que forman parte de nuestro entorno y que también están siendo afectados por la crisis.
Estas aves solían alimentarse de los turistas que frecuentaban el lugar. Hoy, Juan Zambrano es el único que acude al Parque Central de Tegucigalpa, Honduras, para darles de comer. Por: Claudia Mendoza. https://t.co/u0TSKGz9Lv
— Primer Impacto (@PrimerImpacto) April 18, 2020
