Este domingo se disputará la última jornada de la Pentagonal en el Apertura 2019 de nuestra Liga Nacional, y por cómo se han dado las cosas en los juegos anteriores, el torneo también podría acabar.
El detalle es que el líder de las vueltas regulares, el Olimpia, también podría ganar esta segunda ronda, algo que lo convertiría automáticamente en el nuevo campeón del fútbol hondureño.
Obviamente hay gran expectativa con lo que pueda suceder, sin embargo en los últimos días no se ha hablado de ello, sino que el tema de conversación ha estado ligado a lo que sucedió antes, durante y después del partido entre los blancos y la UPNFM.
Me refiero a esa famosa llamada que evitó que John Paul Suazo y José Mario Pinto jugaran en contra del equipo dueño de su ficha, el Olimpia, algo que algunos ven como una situación antideportiva.
Diego Vázquez, técnico del Motagua:
“Lo que pasó el miércoles es lamentable y condenable, primero le sacan la localía a un equipo, arruinan la Pentagonal, y luego lo que pasó con Pinto y John Paul Suazo, totalmente terrible. Pinto fue el jugador que generó dos goles ante Vida… ¿Entonces dónde dejamos el juego limpio? Queda totalmente olvidado”.
Cada quién tendrá su opinión al respecto, pero creo que la mayoría coincidimos con que la directiva del Olimpia (O quién haya hecho esa llamada) se equivocó. No había necesidad de recurrir a ello, pues incluso con esos futbolistas en el campo el “Viejo León” también habría podido ganar, y eso nadie lo duda.
Pero de eso no tiene culpa el técnico Pedro Troglio y todo su equipo de trabajo, incluyendo a los jugadores, así que no quitemos méritos al trabajo realizado sobre el terreno de las acciones.
Si Olimpia se corona campeón este domingo, no será una copa manchada como muchos quieren hacer ver, y para confirmar eso basta con ver los números realizados por este equipo.
En las vueltas regulares rompieron un récord de puntos en torneos cortos, llegando exactamente a 44 unidades tras ganar 14 partidos, empatar dos y apenas perder dos. Mientras que en la Pentagonal solo han tenido un tropezón, por eso están acariciando ese añorado trofeo.
Además, hay un punto clave, y es que durante toda la competencia la “Pimpa” no ha perdido ni un tan solo partido ante los otros denominados grandes, venciendo incluso en tres ocasiones a su más enconado rival, el Motagua.
Entonces, si Olimpia conquista su copa 31 este fin de semana, a los demás no les queda más que aceptar que terminó ganando el mejor, así como sucedió en los torneos pasados, donde se tuvo incidencia arbitral, pero quedó clara la sensación de cuál había sido el merecido ganador.
En fin, así es esto del fútbol, hoy algunos se quejan y en el futuro no dirán nada, y viceversa, ya sea por una u otra situación, pero créanme, casi siempre se terminará imponiendo el mejor.