Durante una expedición realizada en Vietnam se logró captar por primera vez en tres décadas, una especie del tamaño de un conejo al que se le creyó extinto desde hace muchos años atrás. El descubrimiento fue posible gracias a unas cámaras ocultas.
Nguyen, otros fotógrafos e investigadores fueron los que hicieron posible que el mundo entero se diera cuenta de la aparición de este animal que no es ni un ciervo ni un ratón sino la especie de un ungulado (mamífero con pezuñas) más pequeño del mundo.
Pero realmente el hallazgo fue gracias a los pobladores de aldeas locales quienes avisaron a los investigadores que ya habían visto en reiteradas ocasiones al pequeño animal, ante esto se utilizó como estrategia el colocar tres cámaras trampa.
Durante la puesta de las primeras cámaras trampas se logro captar unas 274 fotografías de la especie y en una segunda etapa se instalaron otras 29 cámaras trampa con las que se registraron 1,800 imágenes del ciervo ratón a lo largo de 6 meses.
La supuesta extinción de este animal se ha dado en su gran mayoría por la mano del hombre, pero también por la casa de perros salvajes, pitones y leopardos. Nadie esperaba que después de tantos años de creerse extinto, apareciera de nuevo.
La casa ha afectado a Vietnam en grandes escalas hasta el punto de llamársele como el “síndrome del bosque vacío” que trata de un bosque aparentemente intacto al que se le han arrebatos todas las especies llevándolas hasta el punto de la extinción.