Una manada de elefantes salvajes fue arrastrada por las aguas de un parque nacional en Tailandia, ahogando a seis de ellos, mientras que los guardabosques ayudaron a dos que se encontraban cerca de un barranco.
El personal del Parque Nacional Khao Yai descubrió a dos elefantes con vida y los cadáveres de otros cerca de una cascada que la apodan el Barranco del Infierno, por su gran altura y por el gran caudal de agua que acumula en los inviernos.
Los encargados del parque ayudaron a sacar a los dos elefantes del barranco y dijeron que controlaron su estado de ánimo mientras pasaba el mal clima en toda la zona, y esto beneficio enormemente a estos grandes animales.
“Los dos elefantes ahora están descansando. Están exhaustos por tratar de cruzar el arroyo”, dio a conocer Chanaya Kanchanasaka, veterinaria del parque y encargada del área de los elefantes de toda esa zona.
Por lo general estos barrancos ubicados en el parque se llenan de agua durante el invierno, y en 1992 ocho elefantes también murieron después de que cayera una tormenta. Actualmente, el parque alberga a unos 300 elefantes salvajes y forma parte del Complejo Forestal que fue declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por su gran importancia en el medio ambiente y vida silvestre.