En las hermosas playas de Omoa nos encontramos al pintor Hugo Gil de 64 años, sorpresa la que nos llevamos al ver que tenía una exposición de pintura justo frente al mar y con una sonrisa atendía a todo aquel que se detenía a preguntarle por su arte. Con nosotros no fue la excepción.
Una gran trayectoria respalda a Hugo, nos cuenta que es un fotógrafo profesional más específicamente de Food Styling, sin embargo su trabajo nunca lo detuvo a la hora de dedicarse al dibujo, que más tarde se convertiría en su profesión a tiempo completo.
¿Cómo ha sido la trayectoria de Hugo?
He trabajado como fotógrafo, publicista, también fui productor de Food Styling, he trabajado en Guatemala, Costa Rica y aquí en el país, ahora me dedico en su totalidad a la pintura, es mi pasión y tengo 14 años de estar en esto del arte.
¿Por qué elegir Omoa para vivir?
Tengo 7 años de vivir en Omoa, de estar viniendo a la zona 40 años, viajaba siempre porque me gusta la zona.
Yo soy de Tegucigalpa, quería vientos nuevos, fue por eso que me retiré del ajetreo de la ciudad y empecé a vivir en Omoa, quería la calma que ofrece el lugar y que mejor que estando frente al mar. Al inicio fue difícil porque tuve que abrirme paso en una zona donde no había galerías antes.
¿Aparte de la pintura a qué más se dedica?
Tengo una galería y un café, también tenemos un proyecto en el que empezamos a dar clases a unas personas gratuitamente se llama ‘De las Ciencias al Arte’, tratando de motivar a los habitantes de Omoa, enseñando como podemos utilizar el arte como una ciencia.
¿Cuántas pinturas tiene, recuerda la primera?
Ya perdí la cuenta, pero la primera fue una pelea de gallo, fue una sorpresa porque un día la encontré y la comparé y nada que ver con las que hago ahora. A la hora de pintar me baso en estilos abstractos impresionistas, he tenido buena aceptación en muchas partes a nivel nacional, en San Pedro Sula y Tegucigalpa, también en el extranjero como Guatemala.
¿En qué se inspira para hacer sus pinturas?
Me inspiro escuchando jazz, en cualquiera de sus expresiones, son cosas muy bellas las que salen de la música.
¿Qué les puede decir a las personas para que visiten Omoa?
Que vengan a conocer este hermoso lugar, cerca del mar, siempre he pensado que debemos mostrar las bellezas que tenemos para que cuando las veamos las cuidemos y no las destruyamos.
Sorpresas nos encontramos en el camino y una de ellas fue Hugo Gil quién junto a su esposa Miriam Portillo exponen el arte en la playa, regalándonos pinturas refrescantes que nos hacen admirar el talento que tenemos en Honduras.