Sin duda alguna Canadá nos está dando cátedra de cómo se trata al medio ambiente, a su flora y fauna, esta vez a sorprendido al mundo entero al aprobar el proyecto de ley S-203 que tiene como objetivo la prohibición del cautiverio de ballenas, delfines y marsopas, esta iniciativa fue un gran triunfo para los científicos y organismos de protección animal quienes no pararon hasta lograr la aprobación de esta ley.
Aquí no termina la cosa, otro punto importante a recalcar es que tampoco se permitirá la exportación e importación de estos cetáceos, también se cuidaran sus embriones y esperma, se permitirá tratarlos a menos que sea para fines científicos o si alguno de estos animales requiere atención por parte de personal especializado. La ley entrará en vigencia a finales de este mes de junio.
Todos aquellos que infrinjan la ley tendrán que pagar multas que van desde 200,000 dólares canadienses.
“Los estanques no son sitio para ballenas y delfines. No puede tolerarse más sufrimiento de estos animales, altamente sociales e inteligentes, es un confinamiento intensivo” comentó Rebecca Aldworth, directora general del capítulo canadiense de Human Society International.
