Continuando con el viaje junto a La Marimba, decidimos adentrarnos un poco más en la Ruta Lenca, descubriendo lugares hermosos y personas fascinantes que tienen mucho que contar. Estando en La Esperanza pudimos constatar que el departamento de Intibucá sobresale por la amabilidad de las personas y por sus pintorescos paisajes.
Uno de los hermosos lugares está a 11 kilómetros del municipio de La Esperanza, estamos hablando de la Laguna de Chiligatoro, una espectacular laguna que está rodeada de vegetación, cultivos y se respira total tranquilidad.
Mitos y varias leyendas se ocultan detrás de esta laguna, miembros e invitados de La Marimba pudieron constatar lo majestuoso que es este sitio Lenca.
La Laguna de Chiligatoro se encuentra ubicada al noroeste del departamento de Intibucá, en una aldea lenca dotada de mucha belleza y atractivos naturales excepcionales. La aldea posee el mismo nombre de la laguna y se encuentra a pocos minutos de la ciudad de La Esperanza.
Con más de 850 metros sobre el nivel del mar, se ha convertido en un atractivo turístico muy importante para la zona, ya que llegan muchos turistas a pasar un buen rato en familia, debido a que este lugar transmite paz y bastante tranquilidad.
“Esta laguna es uno de los atractivos turísticos más visitados de la zona, por ser un lugar con muchas leyendas y bastante historia, ya que nosotros los lencas somos bastante creyentes en eso y místicos”, manifestó Melvin Méndez, nuestro guía turístico.
“Esta laguna antes era un río, y la leyenda cuenta que salía un toro asustar a la gente a media noche, unos cuentan que era un toro negro enorme y otros que era de color dorado, la gente del miedo mandó a llamar un Chaman para que hiciera una cura para el toro, dicha cura llevaba un cacho de toro, 3 pelos de gato negro e incorporaron chile, hizo el remedio y consiguió un chilillo y espantaron al toro y es de ahí donde proviene el nombre del lugar: Chile-gato-Toro. Chiligatoro”, relató Melvin
La laguna fue construida en el año de 1962 por varios pobladores de la aldea, con el propósito principal de utilizarla como fuente de almacenaje de agua para la irrigación de los cultivos aledaños al sector.
Su parte más profunda mide 9 metros, y al momento de su creación los pobladores de la comunidad nunca se imaginaron que estaban creando uno de los atractivos rurales más importantes de la comunidad, y que esto iba generar que llegaran turistas de diferentes partes del país.
Esta laguna posee un paisaje extraordinario, por esa razón el patronato maneja diversos servicios de fin de semana para los turistas en los cuales sobresalen los paseos en lancha, senderismo, paseos descriptivos agrícolas y de alimentación.
Desde la fecha de su creación, esta laguna ha servido como fuente de agua para muchos pobladores que requieren el vital líquido para sus cultivos. En el verano La Laguna de Chiligatoro no se seca, por eso los agricultores la utilizan para regar sus plantaciones.
Cultivos de papa, repollo, lechuga y otras legumbres podrán ser vistos alrededor de la zona, ya que el agua de la laguna ayuda a muchas personas que trabajan la tierra en esos momentos difíciles del verano.
“La laguna ayuda bastante a la irrigación, pero también hay bastantes personas que vienen a pescar, ya que el agua posee una alta densidad de oxígeno que los peces se crían de una buena manera y se convierten en una buena fuente de alimento para las familias de la zona”, dijo Melvin.
Cabe resaltar que varios pobladores han invertido para poder recibir cordialmente a los turistas, José Rivas es un claro ejemplo de ello, que junto a su esposa decidieron trasladarse a las cercanías de la laguna y emprender en un negocio de comidas, brindando una atención excepcional a cualquier turista que lo visita.
“Esta laguna ha ido tomando un potencial de desarrollo turístico muy importante, hoy por hoy es la cara de nuestro municipio a toda Honduras, es nuestra tarjeta de presentación al turista, es lo que nosotros ofrecemos a nivel nacional e internacional, es una bonita alternativa nuestra laguna de Chiligatoro”, manifestó don José Rivas, que minutos antes corría de arriba para abajo atendiendo a todos sus clientes.
Rica comida, aire puro y disfrutar un rato agradable en familia, son los motivos para visitar este hermoso lugar en La Esperanza, Intibucá. Los recuerdos y vivencias con amigos y familia no tienen valor económico por eso don José Rivas desde su negocio La Champa, realizó una invitación.
“Aquí los esperamos con una oferta gastronómica digna del lugar que nos enorgullece, estamos ofreciéndoles platos típicos de la localidad, utilizando todo lo que nuestro pueblo produce y dándole un sazón diferente, queremos ofrecer lo mejor de Chiligatoro al turista nacional e internacional.”
Fotos, vídeos y buenas historias se podrán obtener desde la bella Laguna de Chiligatoro, un lugar de la Ruta Lenca que atrapa con sus míticas historias y enamora con sus bellas postales, sí o sí, se tiene que visitar.