El estadounidense-hondureño Teófimo López sigue dando pasos agigantados en el boxeo profesional, y prueba de ello es lo que hizo este sábado en el Madison Square Garden de New York.
El pugilista de sangre catracha derrotó al finlandés Edis Tatli por la vía del nocout en el quinto asalto, cumpliendo con lo dicho antes de la pelea, pues señaló que el europeo no pasaría del sexto round.
https://youtu.be/Ex5hiDRIMbg?t=4m13s
Gracias a este triunfo López retuvo su título de los pesos ligeros de la North American Boxing Federation (NABF), un título regional, pero el ruido que viene haciendo es bárbaro, tanto así que más temprano que tarde llegará su oportunidad por el título mundial.
NOTA: Teófimo López sigue invicto en su carrera profesional, acumulando 13 victorias en 13 peleas, 11 de ellas por KO.
Ahora, la pregunta del millón…
¿Teófimó rechazó la Bandera Nacional?
Esta es la imagen de la polémica: algunos consideran que @TeofimoLopez despreció la bandera de Honduras. He seguido su carrera desde el inicio y siempre ha demostrado afecto y respeto hacia Honduras. Y aunque la imagen es elocuente, seguro explicará luego lo que realmente pasó. pic.twitter.com/7ydw6CPekc
— Rudy Urbina (@Chavelachaparro) April 21, 2019
Más allá de su espectacular victoria, que es de lo que deberíamos estar hablando, se ha levantado mucha polémica por lo que hizo después de la pelea, cuando le intentaron pasar la Bandera Nacional y al parecer la “rechazó”.
Es curioso, porque quienes son más fuertes en sus ataques sobre este tema son los mismos que dicen que no es hondureño, entonces no entiendo… ¿Por qué la indignación?
Pero bien, ese no es el tema. Si ustedes han seguido de cerca la carrera de Teófimo se darán cuenta que no rechaza ser de estas tierras, y que lo que sucedió este sábado fue nada más un tema de casualidad; él estaba en plena entrevista y solo no quiso ser interrumpido, nada más.
Si en realidad no estaría de acuerdo con cargar el peso de representar a Honduras lo hubiera hecho saber desde la primer pelea, pero no, siempre ese manto sagrado lo ha acompañado, y en varias oportunidades se arropó con él.
¿Qué raro que en esos momentos nadie lo resaltó, cierto?