Lo sabía… no era mi culpa
Basémonos en estudios, porque cuando comprobamos científicamente los hechos, podemos culpar a las personas con hechos y no palabras. Ahora vengo a culpar a mi mejor amiga, por estos kilitos de más que tengo.
Una investigación hecha por Nicholas Christakis y James Fowler, profesores de Medicina de Harvard publicaron en la revista ‘New England Journal of Medicine’ un artículo en el que aseguran que los hábitos tienen que ver con la influencia que nuestros más cercanos tienen sobre nosotros. Es decir, si tu mejor amiga sube unos kilitos de más la posibilidades de que vos aumentes tallas incrementa en un 57%.
Este estudio resulto después de que estudiaran a 12 mil adultos y sus relaciones sociales, primero se monitoreó el peso de cada uno de ellos y después con el tiempo se vio que cada uno adoptaba el mismo comportamiento alimenticio que la persona que tenían al lado.
Ummm, me pasa en el trabajo también, que gracias a mis compañeros de trabajo ahora como más de la cuenta, ellos son con quienes paso todo el día.
Se dice que esto pasa porque al estar rodeados de personas con sobrepeso, percibimos que es normal y nos preocupa poco nuestra apariencia. Ahora ya pueden buscar a sus amigos o cercanos que los han hecho engordar y tirarle un zapato en la cabeza.
Uggghhhh… Gracias mejor amiga, Gracias compañeros de trabajo.
Fuente: Nueva Mujer