¡Vaya sorpresa!
Esta semana el exfutbolista Mario Berríos ha sorprendido a propios y extraños al interponer una demanda en contra del equipo donde realizó toda su carrera futbolística, el Marathón de San Pedro Sula.
Los movimientos legales con el tema de la demanda comenzaron a darse a finales del año pasado, pero fue recientemente que la misma entró en acción ante el Tribunal Nacional de Arbitraje en el Fútbol (TNAF).
Ahora, la pregunta que muchos se estarán haciendo… ¿Por qué?
Bueno, dejemos que sean los mismos protagonistas que expliquen la situación.
Orinson Amaya, presidente del Marathón:
“Hay que dejarlo claro, esa deuda es extrafutbolística, no es de salarios atrasados. Esa es una deuda de una transacción que hizo con Yankel Rosenthal cuando él era presidente del club. Fueron de unos terrenos, Yankel les pagaba con terrenos y no sé qué problemas hubo con las escrituras. Lo más fácil para ellos es cobrarles a través de Marathón”, mencionó Amaya en declaraciones compartidas por el Diario Deportivo Diez.
“Él (Berríos) tiene un representante legal que es Astor Henríquez, entonces de acuerdo a la capacidad económica que nosotros tenemos estamos dispuestos a pagarles 50 mil lempiras mensuales, y eso haciendo un esfuerzo grande, pero ellos quieren que sean 100 mil lempiras mensuales; si nos obligan a eso estarían haciendo que el equipo no compita”, agregó el dirigente al programa radial Panorama Deportivo.
Mario Berríos, exfutbolista del Marathón:
“La verdad no era lo que esperaba, nunca se me cruzó por la cabeza llegar a esas instancias, como una persona agradecida con el equipo y la afición; llegar a este momento no ha sido fácil, pero siento que es la única alternativa que me quedó, por eso la decisión ya está tomada”, dijo al diario Diez.
Con estas reacciones es claro que las cartas están sobre la mesa; la actual directiva del Marathón aceptó dicha deuda y está dispuesta a pagarla, el problema es que no lo puede hacer de manera solvente por la situación económica que vive el club, la cual no es la más rentable.
Por cierto, por cuestiones de seguridad no se revela cuál es la cantidad definitiva, pero al parecer hablamos de millones, así que es un problema muy pesado para la escuadra sampedrana. Ojalá y todo se solucione.
