No me puedo imaginar la cantidad de dolor que sentirá una madre al ver a su hijo sin vida, en una caja, sin haberle podido decir “Te Amo” una vez más.
Como quisiéramos algunas veces volver el tiempo atrás para haber dicho cuando significa una persona para nosotros, cuanto le queríamos y le deseábamos la felicidad. Algunas veces es demasiado tarde para cambiar el destino y solo tenemos que sentarnos a contemplar en pensamiento las palabras que nunca dijimos.
Emiliano Sala regresa a casa, pero sin vida. Luego de haber encontrado su cuerpo en lo profundo del mar en el Canal de la Mancha este pasado 7 de febrero , vuelve a Argentina donde será recibido por Mercedes, su madre, Romina su hermana y Nala, su mascota, que se preparan para darle el último adiós.
Después de varias semanas investigando y buscando finalmente se le puede dar un pequeño cierre a esta fatídica historia, encontraron a Emiliano, sí, pero se desconoce el paradero de los demás tripulantes de la nave. Los medios internacionales han presionado a los oficiales de búsqueda que sigan con su tarea.
Mientras en Argentina los restos del futbolista llegaron esta mañana desde Inglaterra, trasladándolo a su pueblo natal, Progreso, Santa Fe. Todos los gastos del traslado fueron costeados por el Cardiff City, el equipo que lo había fichado antes del accidente. En el funeral estarán entidades tanto del antiguo Club en el que jugaba (Nantes) y como el actual que le había contratado (Cardiff City).
Un adiós a un grande que tomó un vuelo para alcanzar sus sueños y nunca llegó al destino.
Hasta pronto Emiliano.