Es necesario crear conciencia de los resultados que obtendremos si seguimos haciéndonos de la vista gorda ante problemas como la pólvora en Honduras. 44 son los niños quemados en estas fiestas, es indignante porque no debería de haber ninguno, la responsabilidad de los padres es crucial en estos eventos y al parecer en nuestro país no toman el asunto con la seriedad que debería tratarse.
NO queremos ver a niños quemados en esta Navidad y peor aún ver ascender el número de afectados, es necesario tomar conciencia de la imprudencia que están teniendo algunos padres que dejan a menores de edad manipular pólvora.
En cualquier lugar de Honduras es necesario tomar medidas drásticas, si van a permitir que sus hijos pierdan algún miembro de su cuerpo por jugar con la peligrosa pólvora deberían estar preparados para los resultados de esas acciones.
El llamado es para los agentes policiales para que en estas fiestas todo se viva en paz y armonía, que no veamos a nadie sufriendo en los hospitales. Que estos 44 niños no se conviertan en muchos más en estos días que quedan.
Fuente: El Heraldo