Nadie se merecía el título de Liga Concacaf más que este señor, el delantero Román Rubilio Castillo, esto por lo demostrado en el terreno de las acciones.
En el juego de ida el Herediano había ganado 2-0, por lo tanto en la vuelta existía la obligación de remontar, y el principal objetivo en un inicio era empatar el global.
La misión no era sencilla, pero desde un principio los azules mostraron una actitud positiva, principalmente ese “9”, el máximo goleador histórico de la institución azul.
Su esfuerzo se vio recompensado con un doblete y con ello la ilusión motagüense volvió a la vida, sin embargo un tanto en contra al minuto 84 destruyó el sueño de las “Águilas”. El Herediano se terminó coronando campeón de la Liga Concacaf.
Premio Botín de Oro: Rubilio Castillo de @MOTAGUAcom#SCL2018 pic.twitter.com/zeFx7vegyc
— Concacaf Champions Cup (@TheChampions) November 2, 2018
- NOTA: Román Rubilio Castillo se quedó con el Botín de Oro, siendo el máximo goleador del torneo con cinco tantos, al igual que Edwin Aguilar del Tauro FC y Yendrick Ruiz del Herediano.
El dolor es evidente en la familia azul, pero ante ello definitivamente se debía aplaudir el esfuerzo de los futbolistas, principalmente el de ese delantero que en ningún momento bajó las brazos.
En pocas palabras: ¡Señor Castillo, qué pedazo de potra! Sin duda alguna se voló la barda con su actuación.
Sus lágrimas al final del juego solo reflejan el amor que le tiene a la camiseta, esa que no dudó en volver a defender al no poder dar el salto al extranjero, tal y como todo futbolista añora.
El aficionado azul definitivamente te respeta, y más que eso te agradece todos los momentos felices que has regalado. Sí, es cierto, este jueves no pudo ser, pero con futbolistas como vos es claro que los títulos regresarán tarde o temprano.
De parte de toda la familia motagüense: ¡Gracias, Rubilio!