Este jueves el Motagua no pudo celebrar en casa lo que hubiese sido un título histórico, esto tras perder en el global 3-2 ante el Herediano en la final de la Liga Concacaf.
El resultado definitivo de la serie ha caído como balde de agua fría en toda la familia motagüense, tanto así que algunos seguidores se han dejado llevar y se atreven a señalar que el ciclo del técnico Diego Vásquez ha terminado.
¿Sus argumentos?
¡Sencillos! De ocho finales disputadas solo ha ganado tres, y eso no los tiene satisfechos.
Entonces… ¿Fuera Diego?
No sé qué opinan ustedes al respecto pero yo digo que no, que aún no puede irse del equipo.
Sí, es cierto, últimamente el club ha llegado a las finales y se ha quedado a un paso de la gloria, pero nadie puede desconocer que Diego Vásquez le ha regresado la esencia de grandeza a la institución.
Antes de su proceso con el azul era común ver al Motagua en momentos complicados, técnicamente mendigando por un puesto en la liguilla, sin convencer y sin mantener la regularidad que tanto se añoraba, esa que con el estratega argentino se ha conseguido.
A lo largo de su trayecto con las “Águilas” ha cometido errores, y todos hemos sido testigos de ello, pero cada uno suma como experiencia, y esa ha sido la base de un proceso destacado en toda la historia del club.
Si llega a la final de la Liga Nacional y vuelve a perder no lo dudaría, su proyecto debería continuar, aunque claro, una cosa es perder y otra el cómo se pierde. Este jueves no se consiguió el título de Liga Concacaf, pero nadie puede negar que el esfuerzo se hizo, y eso en ocasiones tiene mucho valor.
