No puedo creer que vayamos a vivir un clásico sin las dos estrellas más grandes del mundo.
Me he visto cada clásico entre los dos rivales de la liga BBVA y siempre sentía la presión y emoción de ver encontrarse al 10 del Barcelona y al 7 del Real Madrid, hasta me sudaban las manos, me pegaba taquicardia y otras vainas más.
Me emocionaba demasiado el pitazo inicial del partido y sabía que se venían 90 minutos con el corazón a mil por hora, bueno al menos respiraba un poquito en el medio tiempo, pero sí que sufría con cada partido, pero ahora no tanto y sé que muchos de ustedes también se sienten como yo.
¿Qué les pasa a estos equipos? No solo es la falta de estas dos estrellas, sino también los resultados en liga que van muy pero muy mal.
El Madrid tiene 4 partidos ganados, 2 empatados y 3 perdidos y el Barcelona; 5 ganados, 3 empates y una derrota. Así como van capaz el Levante se lleve la copa a casa por esta vez… ¡Tampoco va!.
En otros tiempos diría que, “el domingo se paraliza el mundo” como nos gusta mencionar cuando juegan los blaugranas contra los blancos, pero esta vez no lo siento así, no se va a paralizar nada, porque no vamos a ver a dos jugadores espectaculares estrecharse la mano en la cancha y no veremos un duelo del que nos tienen acostumbrados. No les mentiré estaré totalmente pendiente del encuentro, pero no será igual.
La crisis del Madrid sigue en racha y ahora es Lopetegui en el ojo del huracán, tanto así que ya están mencionando a otro entrenador para suplirlo y sé que ustedes reconocerán un nombre, se cree que el grandísimo ‘Guti’ podría llegar a dirigir en el Bernabéu.
Por otro lado, la lesión de Leo no es excusa para el momento que están viviendo los culé que ya desde antes nos tenían acostumbrados a ganar y apenas empatar partidos y ahora se les ha ocurrido perder y perder.
Esperamos todos, que este clásico nos demuestre que dentro del campo tenemos a otros 22 jugadores que sacan la cara por su equipo y que no existe tal cosa como la; Messi-Dependencia y Cristiano-Dependencia.