Una muestra más de que nuestro fútbol no va por el mejor camino.
El Real España se verá obligado a cambiar de sede el partido de vuelta de su respectiva llave de octavos de final en la Liga Concacaf, esto porque el estadio donde juegan como local no cuenta con las condiciones necesarias.
La Concacaf inspeccionó las instalaciones del Estadio General Francisco Morazán de San Pedro Sula, y de acuerdo a los apuntes el alumbrado eléctrico no está en plenitud, así que ni modo, ante el Tauro FC de Panamá la vuelta se debe jugar en otro inmueble.
El Estadio Olímpico, siempre de San Pedro Sula, será la casa de la “Máquina” el próximo jueves, cuando intente cerrar de manera positiva su llave ante la escuadra panameña, esto pensando en clasificar a los cuartos de final de la competencia.
Definitivamente se deben tomar cartas en el asunto, haciendo especial énfasis en los encargados del Morazán, quienes deberían tener al estadio siempre en óptimas condiciones.