Las Delicias de Olancho despacharon a Motagua de la Copa Presidente en el primer partido oficial de la temporada.
Motagua estuvo abajo la mayor parte del encuentro 2-0 y en los últimos minutos logró descontar, pero no fue suficiente para que el ciclón que no asustó a los de la Liga Mayor se fuera eliminado de la Copa.
No es la primera vez que le sucede a Motagua, el año pasado también fue despachado por un equipo semiprofesional.
¿De quién es la culpa? ¡Para mí y por eso es una opinión! La culpa es de los jugadores y la mentalidad pobre que por estar en una cancha y ante jugadores humildes piensan que van a ganar con la camiseta.
Eso ya pasó de moda, si no me creen, basta con ver el mundial de Rusia 2018, donde los menos pensados fueron los que llegaron hasta las últimas instancias.
Ya lo de asustar con la camiseta pasó, lo de ganar caminando, pasó; lo de menospreciar a los rivales sigue y seguirá pasando en el fútbol mundial y nacional.
Basta recordar aquel papelón en Copa Oro, frente a Guadalupe, Trinidad y Tobago, Martinica y Guyana que casi nos deja fuera.
Hay que trabajar la mentalidad del jugador hondureño, eliminar de una vez por todas el gol en el último minuto, el estar debajo en el marcador y no darlo todo para rescatar el juego, el pensar que se gana con la camiseta.
¡Desastre total lo de Motagua!
