En un juego con muchas emociones, Francia derrotó 4-2 a Croacia en una final donde no se guardaron nada los equipos. Los croatas iniciaron con una leve desventaja ya que a lo largo de la Copa del Mundo jugaron un partido más que Francia, por las tres prórrogas frente a Rusia, Dinamarca e Inglaterra.
El equipo francés es el más joven de Rusia 2018 y lograron quedarse con el trofeo más codiciado de la historia.
Croacia es inmortal, llegaron venciendo a todos, contra todos los pronósticos, un país de apenas 56 mil 594 kilómetros cuadrados y cuatro millones de habitantes, fundado en 1991 y que ha estado en guerra por muchísimo tiempo, hoy dieron un ejemplo al mundo. Algo a tomar en cuenta es que el director técnico de Croacia Zlatko Dalic´gana menos que Jorge Luis Pinto con Honduras.
Las acciones fueron intensas y nos mantuvo entretenidos de principio a fin.
Pitana, árbitro argentino, tuvo incidencia en el resultado al pitar una falta inexistente sobre Griezmann que origina el tiro libre con el cual Francia abre el marcador.
A los 18 minutos un centro al área y Mandzukic peina la pelota y la mete en su propia portería, 10 minutos después Perisic sacó un zurdazo cruzado que venció la portería francesa y conseguía la paridad.
Luego de un penal sentenciado por el VAR por primera vez en la historia, Griezmann consiguió 2-1. Pogba puso el 3-1 con un balón que le dejaron frente al marco.
La perla del mundial, Mbappé puso un derechazo potente que puso el lapidario 4-1.
Croacia descontó con un errorazo de Lloris que Mandzukic pudo concretar.
Francia es campeón, pero también Croacia se hizo inmortal.