Hace rato que Olimpia no ve una en Liga Nacional, llega a semifinales, pero no es capaz de romper ese candado que lo deja al margen de la fiesta grande del fútbol nacional.
Es el cuarto torneo consecutivo que Olimpia se queda en semis, y es momento de pensar en una renovación total, los jugadores no dan a basto, o al menos eso muestran en la cancha, el equipo perdió la mística de grande y se recurre a los mismos apagafuegos de siempre, los Espinoza.
Hoy el planteamiento cuando estaban 11 contra 11 en la cancha, parecía que iba a favorecer a Olimpia, pero después de las expulsiones del mundialista con Panamá, Luis Ovalle y Eder Alvarado. El primero me parece bien expulsado, el segundo no, porque aquí por cada falta a los “protagonistas” árbitros, les gusta perder 2-3 minutos por acción.
El arbitraje nacional da pena, pero da más pena que el equipo con más recursos en el país no puede llegar a la final y ser campeón.
Es tiempo que en Olimpia se vayan los mismos de siempre, la directiva y dejen de poner a los Espinoza, hoy teniendo nueve en la cancha, lo dejaron con 8, metiendo a Wilson Palacios, jugador que ya se le olvidó que es jugar con intensidad y como profesional.
Una verdadera pena para los aficionados del Olimpia que siguen sin ver una.
