Me quedan mis dudas de los factores que toman en cuenta los miembros de la Academia para premiar a la mejor película en los Oscar.
Este año el Óscar fue para la producción de Guillermo del Toro, “La Forma del Agua”, una película que a mi juicio es totalmente predecible y aburrida, caso contrario a “Dunkerque” del director Christopher Nolan, una película que tiene todo para haber sido la ganadora de la noche, incluyendo mejor director.
Hoy la historia es otra y Guillermo del Toro es el mejor director del año, junto con la mejor película.
Tengo mis dudas, porque como todo mortal que vio la película, el sentimiento que dejan ambas “movies” es completamente opuesto, cuando terminé de ver “La Forma del Agua” sentí que había perdido el tiempo, no me gustó para nada, un tema poco común y que ya se había hecho anteriormente con “El Monstruo de la Laguna Negra” (1954). No se puede negar que la producción, actuación y el ambiente son muy buenos, excelentes.
Sin embargo, me quedo con el sentimiento que me dejó “Dunkerque” sumamente envolvente de principio a fin, te revive la nostalgia, el hecho de imaginar cómo pudo haber sido la magnitud del conflicto bélico más grande de la historia en el planeta, la maldad de atacar a personas que estaban varadas en un muelle esperando ser rescatados.
“Dunkerque” merecía más, por lo menos como mejor película del año, porque es sencillamente fenomenal. Mi favorita del año para ser sincero.
No soy crítico de cine, pero sí puedo decir que me gustó y que no de las “movies”.
“Dunkerque” tenía que ganar hombe.
Y “Coco” la mejor del mundo. Que belleza de movie, bien merecido el Óscar para estos muñequitos que muestran la riqueza de la cultura mexicana.
