Con una lentitud desesperante y sospechosa, el caso del asesinato de Carlos Collier Núñez es un ejemplo más de lo torcida que es la “justicia” en Honduras.
El 11 de octubre en horas de la noche se produjo la muerte del joven universitario; luego de eso, sus amigos lo fueron a tirar a una calle cerca de la colonia Loarque y el anillo periférico de Tegucigalpa.
Después de esto la trama ha sido una completa enredadera, al punto que a dos meses de su muerte no ha pasado absolutamente nada.
Cuatro personas gozan de medidas sustitutivas y una está presa en la cárcel de Támara.
Hablamos con la madre de Carlos Collier, Tatiana Nuñez, y nos cuenta cómo va el caso a estas alturas:
¿Cómo va el caso de su hijo?
Uno de mis abogados fue a la Corte por petición mía ya que me informaron estaba sólo para firma la solicitud de apelación en el caso de cambio de medidas en relación a Zamora y que sólo faltaba la firma de los magistrados.
En el caso de apelación interpuesta por mis abogados estaba parada, ya que la defensa no había presentado los agravios, según mi abogado la presentaron la semana pasada y pasará el expediente a los juzgados, cosa que no creo porque ya van de vacaciones.
¿Cuál ha sido el atraso?
El caso de mi hijo el atraso fue porque la defensa presentó agravios hasta la semana pasada y porque les conviene a los abogados esto se retrase. En el caso se Zamora sí ya va bien adelantado. Posiblemente hasta lo saquen antes de las vacaciones de la Corte.
¿En qué etapa está el caso?
La etapa del caso está en espera de respuesta por la Corte de Apelación en ambos casos.
La vimos exigiendo justicia con la esposa de Alfredo Landaverde. ¿De qué manera se van apoyar?
La señora Landaverde me invitó a su evento de aniversario de la muerte de su asesinado esposo, fui con el fin de apoyarla y también aprovechar la oportunidad para reaparecer y explicarle al pueblo cómo va el caso y exigir justicia, que es algo que ambas queremos.
¿Qué sabe de los implicados?
Los implicados andan como si nada ha pasado, Elías hace poco regresó a beber donde uno de sus amigos en Loarque.
James en bares, Olga también en bares y escribiendo a los amigos de mi hijo para darles su versión de los hechos, dice mentiras y yo me pregunto que si es inocente como dice por qué no habla ante un juez.
Susano de compras en el mall y comiendo. Llevando sus vidas normales sin remordimiento alguno, sin ningún tipo de responsabilidad por el crimen perpetuado.
El caso se supone va caminando pero no lo creo, quizás el otro año inicien audiencias y den resoluciones en la Corte.
De mi parte exijo justicia y que la flamante Corte Suprema de Justicia se pronuncie en base a ley. No a intereses de abogados de la defensa, que sólo ahí pasan.
Ya es tiempo que este país le responda al pueblo y yo soy parte de la República de Honduras, por lo que no pararé hasta que mi hijo obtenga la justicia que merece.
