Cuando escribimos es para expresar nuestros pensamientos, en ningún momento se hace para quedar bien con nadie o llevarse de encuentro a quienes no compartan las ideas.
Por eso es que puedo expresar que los jugadores que no quieren venir a la selección son unos culeros bien hechos. Cuando jugaban en la Liga Nacional peleaban y rogaban por ponerse la camiseta de la bicolor aunque no tuvieran el nivel que se requiere para vestir la gloriosa de la “H” en el pecho.
Jugadores como Roger Espinoza, “Choco” Lozano, Rony Martínez, Jerry Bengtson que ahora son grandes eruditos detrás del micrófono para desear suerte a la selección en los juegos contra los ticos y los mexicanos.
Cínicos y sinvergüenzas es lo que son. Mal agradecidos todos.
Es por eso que admiro a jugadores que aun lesionados se presentaban, pero respetaban el llamado y la solicitud del técnico de turno.
Espero que los corajudos que atendieron el llamado de Pinto para rescatar el barco que tiene el agua a la mitad sean lo suficientemente consientes de salir a dejar el pellejo en San José y en San Pedro Sula para sacar los seis puntos que nos separan de Rusia 2018.
Honduras depende muchísimo económicamente que este proceso tenga éxito.
¡Vamos muchachos, dejen la piel en la cancha!