Ni todo el oro del mundo podría convencer a Jennifer Aniston para que se una a Instagram o alguna otra red social.
“¡Lo hago para mantener la cordura! En serio, cada vez que miro a mi alrededor y veo a la gente constantemente pendiente de sus teléfonos móviles… siento que nos estamos perdiendo muchas cosas. Es algo que hemos creado nosotros mismo”, dijo Aniston.
Jennifer no quiere ni oír hablar de las redes sociales, donde afirma que es el terreno de juego preferido de aquellos que disfrutan criticar desde el anonimato.