Abrahán Güity es un joven estudiante de la carrera de Música de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y fundador Agrupación Latina La GuaGua. Si querés ponerle un poco de salsa a tu vida, o simplemente querés pasar un momento inolvidable, tenés que escucharlo tocando saxofón.
En un momento de tristeza o de alegría, imagino que lo primero que haces es agarrar el saxofón y comenzar a tocar ¿Qué canciones son esas?…
En un momento triste la primera es: “A mi manera” de Sinatra, es una pieza que me ha tocado mucho y que me calma, siempre me ha marcado mucho, me relaja. Es un momento íntimo entre mi instrumento y yo.
En uno de alegría, me inclino por los boleros, en especial “Bésame mucho”; esta canción la hemos hecho en muchos ritmos y causamos sensación ja, ja, ja…
Ja, ja, ja… ¿Te ha tocado enamorar a alguien y te has apoyado con el saxofón?
¡Uyy, sí!… Es algo que aunque no quiera se da, porque tal vez estoy tocando y hay alguna chica guapa en el público y si uno ve que la chica me ve, entonces uno toca con más pasión pues, ja ja ja .
Además que siempre está la picardía, no bajarle la mirada y todo eso ja, ja, ja.
¿Qué sentís y qué representa el tocar el saxofón para vos?
El saxofón ya es parte de mí, no puedo estar un día sin estudiar o tocar, ya se volvió mi estilo de vida, es una prolongación de mí.
Para los que quieren aprender: ¿Se gasta mucho, es difícil?
Sí se gasta, como todo en la vida. ¿Difícil? Sí tienen su grado de dificultad cuando uno lo quiere agarrar en serio, si alguien se quiere meter a esto solo me queda alentarlo porque la música te abre la mente, en la música hay Matemáticas, hay Filosofía, hay de todo.
La música hace un poco más humana a la persona.
¿Cúal ha sido la presentación que más recordás?
Fue con la GuaGua en la Escuela del Zamorano, al llegar allá nos miraban muy jóvenes y no creían que podíamos tocar salsa, al subir al escenario se les miraba la cara de asustados; minutos después de empezar toda la gente comenzó a bailar, incluso al rector le gustó tanto que nos dio una hora más para bailar.
¿Cuáles son tus metas en el futuro?
Acaparar el mercado, tanto personalmente como con el grupo y llegar y quitar a los que están arriba ja, ja, ja.
¿En qué lugar del exterior te gustaría presentarte?
Tocar en New Orleans, cuna del jazz, es una ambición y un sueño para mí, tocar y aprender de lo grandes maestros.
