Hay cosas que suceden y que definitivamente ya no nos sorprenden, algo que debería preocuparnos, pues hablamos de situaciones puntuales que muchos consideramos injustas, tal y como se dio con el futbolista hondureño Juan Carlos García.
Exactamente el 15 de febrero del 2015 se dio a conocer que el catracho padecía de leucemia, algo que cayó como balde de agua fría en los seguidores del fútbol nacional, ya que hablábamos de un jugador en plena actividad con la Selección Nacional y su equipo, el Wigan de Inglaterra.
Desde entonces García no se ha dado por vencido, ha demostrado ser un auténtico luchador y poco a poco se ha ido recuperando, a pesar de que la Fenafuth le dio la espalda, ya que en ningún momento lo apoyó.
“Voy a hacer una aclaración, el Wigan se han comportado a la altura conmigo, todos son unos profesionales, caballeros y la parte humana que es lo más importante y estoy muy agradecido con ellos, han sido los que han estado firmes conmigo (…) Por otra parte no recibí apoyo, ni de la Federación, Concacaf, ni de FIFA, de ningún lado”.
Así de directo fue Juan Carlos García en una entrevista brindada a la sección de El Loco de Limber en el Diario Deportivo Diez, donde mostró su indignación por no recibir ayuda en un momento tan difícil cuando siempre estuvo presente para la Selección.
Es importante destacar que en aquel entonces la Fenafuth estaba bajo la presidencia de Alfredo Hawit, quien actualmente junto a Rafael Leonardo Callejas, está en Estados Unidos siendo judicializado por asuntos de corrupción.
A pesar de ello Juan Carlos García destacó que el tiempo ha pasado y que nadie se ha comunicado con él para conocer su desarrollo.
“Al principio recibí algunas llamadas, pero yo estaba un poco desconcertado, después del diagnóstico estaba confundido, no estaba apto para atender (…) después no volví a saber más. Con todos estos seis años que estuviste jugando, que te esforzaste, que arriesgaste tu vida en un terreno de juego por defender con clase y con calidad a la Selección de Honduras (…) No quiero ser una persona malagradecida, pero en el mundo actual del fútbol uno espera ese apoyo”, agregó García.
Sin duda alguna es un tema difícil de tratar, y todos tendremos una opinión diferente al respecto, sin embargo estoy casi seguro que la mayoría de los aficionados vemos la situación como algo injusto.
Lo importante es que el Wigan nunca ha dejado solo al catracho, quien actualmente vive en Inglaterra y sigue en recuperación, esperando volver a las canchas de fútbol.