Los jugadores de la Selección Nacional son los primeros a los que les duele perder un partido.
A nadie le gusta perder. ¿Por qué nuestros futbolistas van a ser la excepción?
No es cierto que los aficionados sufrimos más con las derrotas. Claro que una derrota como la del 6 a 0 con los gringos es un trago amargo, un momento duro, de dolor, pero dudo mucho que se compara a lo que sintieron lo de Jorge Luis Pinto cuando salieron de la cancha e iban caminando a los camerinos.
Solo un idiota puede decir que los jugadores no le ponen y no le tienen amor a la camiseta.
¿Los brasileños tampoco aman a su país porque perdieron 7 a 1 en su propia casa con Alemania?
¿Lo mismo se puede decir de los mexicanos por su derrota de 7 a 0 con Chile?
Ya que aquí nos da gripe cuando Barcelona y Real Madrid estornudan, pondré un par de ejemplos de esos clubes.
¿Son turuncas y mierda Messi, Neymar, Suárez e Iniesta porque perdieron 4 a 0 con el PSG?
¿Eran “turuncas” los del Barcelona cuando cayeron 4-0 con el Bayern en semifinales de la Champions?
¿Eran la ver… los del Madrid por el baile que le dio el Bayern -4 a 0-, en Champions?
Los jugadores de la H le ponen en cada partido. De eso no tengo ninguna duda. Pero hay algo que a los sabelotodos se les olvida: que las grandes derrotas, como los grandes triunfos, son parte del fútbol.
Creo firmemente que no clasificaremos al Mundial. No porque no le pongan ganas, sino porque no tenemos un buen equipo, y México, Costa Rica y Estados Unidos son superiores.
Ojalá que esté equivocado, especialmente por aquellos que encuentran en la H la única alegría de su vida.
(Me valen aquello que creen que la única manera de demostrar amor por Honduras es poniéndose una camiseta azul y blanco, o manejar dos días para ver un partido. Porque ahora resulta que solo aquellos que sufren con las derrotas de la H son patriotas, y el resto un “atajo” de vendidos sin alma).
Aunque entiendo la reacción de estos “aficionados” que en el vídeo se bajan el canasto e insultan a los jugadores, es algo que deploro y me provoca tristeza y pena.
A través de la historia, esos que ahora llamamos “vagos”, “turuncas” y “la verg…”, han puesto más en alto el nombre de Honduras que nosotros.
No hay personas más desagradecidas que los aficionados del fútbol. Rápidos para aplaudir las victorias; y más veloces aún para lanzar botellas y piedras en en los momentos de las derrotas.
https://youtu.be/TD06wjJnm8A
