La semana pasada, Alfredo Mejía partió nuevamente para Grecia. Con la diferencia que se marcha al Xanthi FC, equipo que iguala en puntos al Panionios con 32 y se pelean el segundo puesto en la Súper Liga de Grecia.
Antes de partir, nos sentamos con Alfredo en Bliss Bar & Appetizers a platicar de su futuro próximo y por supuesto de lo logrado con la Selección Nacional.
¡COMENCEMOS!
¿Cómo se dio tu contacto para regresar al fútbol griego?
Ellos anteriormente ya me habían hecho un ofrecimiento, cuando yo estaba en el Panthrakikos. En ese momento no llegamos a un acuerdo. Hace poco se volvieron a abrir las negociaciones y llegamos a un acuerdo nuevamente. Gracias a Dios se dieron las cosa.
¿Eso fue mientras vos estabas con Marathon?
No, ya había terminado el torneo. Fue mientras se disputaba la Copa Centroamericana, ahí volvimos a tener contacto con ellos y me hicieron el ofrecimiento de volver a Grecia.
¿Por cuánto tiempo firmaste?
Por un año y medio.
¿Por qué varios medios sustentaban que ibas a segunda?
Existía esa posibilidad, pero al final salió la oportunidad de Xanthi. Un equipo que está peleando cosas importantes y esas son mis aspiraciones. Ya conozco la ciudad, el fútbol griego y me gustó la idea. Dios quiera que el equipo pueda seguir peleando los primeros lugares y llegar a competiciones europeas. Estaría llegando a mitad del torneo y finaliza en mayo.
Has pasado por tres equipos en Honduras. ¿Con cuál te sentiste más apegado? ¡Sin pena!
Ja, ja, ja. Fueron etapas diferentes, porque en España llegué a ser capitán a mi corta edad. Luego tomé la decisión de ir a Motagua, porque Amado es mi ídolo y tenía esa opotunidad de poder compartir con él y seguir aprendiendo. Después vine a una etapa de Marathón, donde, en lo personal, no venía de un buen momento y logré recuperar mi nivel y 6 meses después me fui para Grecia.
Al regresar, vine a una etapa muy bonita, que fueron estos 6 meses en Marathon y la pasé muy bien.
¿Cómo te sentiste al jugar a la par de tu ídolo y ahora tenerlo en la Selección?
Ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Cuando llegué al equipo, él me acogió. Me dio la mano, me dio su amistad y cada cosa que hacía mal me la corregía. Para mi eso fue muy importante porque yo quería aprender de Amado por lo que representa para el país como futbolista. El siempre estaba ahí, corrigiéndome y aún está y sigue siendo importante, porque aún sigo aprendiendo.
¿Quisieras verte apegado al estilo de Amado?
Es que Amado es único. Ahora el fútbol es diferente, es más de contacto; él era de mucha calidad dentro del campo porque era más con el balón. Es muy diferente.
Después de ganar la Copa Centroamericana; ¿Cómo lo ves bajo tu perspectiva?
Para mí es una bendición de Dios. En el 2011 tuve la oportunidad de jugar y ser campeón también. Así que se convierte en mi segunda medalla.
Yo quería ganar este campeonato por lo que representa. Muchos pensaron que íbamos como un grupo limitado o nuevo y no había confianza. El jugador hondureño demuestra que tiene esa garra, sea quien sea. Nuestra respuesta fue quedar invictos y campeones.
¿Es un empujón anímico de cara a la hexagonal?
Sí, definitivamente. Debemos seguir creyendo en el trabajo del profesor Pinto y el cuerpo técnico y su forma de implementarlo con nosotros. Eso nos va a ayudar para poder seguir creciendo como Selección y llegar mucho más largo.
¿Ese es el ambiente generalizado que vive el equipo?
Sí, todos sabemos de nuestra calidad y sobre todo el deseo que tenemos por seguir cosechando triunfos y eso es lo que nos motiva a seguir trabajando y esforzándonos.
No sé si soy yo, pero al momento de entregarle la copa a Pinto en la celebración del campeonato de la Copa Centroamericana, borraron todo tipo de comentarios de mal ambiente en el grupo y demostraron unidad…
Imaginate tanto tiempo encerrados y trabajando… ¡No es fácil! Pero tratamos de compartir, de ser hermanos dentro de la cancha y fuera de ella. Al final esa unidad se vio reflejada en el torneo. Nos llevó a ser campeones invictos y entregarle la copa al profe, que es un verdadero apasionado por lo que hace. En cada entrenamiento se siente su espíritu ganador y eso te lo transmite a uno como jugador.
Se vienen dos rivales complicados; Estados Unidos y Costa Rica. ¿Cómo los ves para la Hexagonal?
Estados Unidos no deja de ser Estados Unidos a pesar de sus dificultades. Nuestras aspiraciones son ir al Mundial y para eso tenemos que ganarles.
Costa Rica viene a nuestra casa y debemos hacernos respetar. En esta Copa andábamos con una Selecición prácticamente nueva y cuando se incorporen el resto de jugadores funcionaremos mejor. Esta Copa nos dio mucha confianza para muchos de cara a estos dos partidos.
