Ok. Son 37 años. Es todo un veterano. Ya no corre como antes, pero esto, la inteligencia, sigue intacta, así como el toque mágico que lo lleva a convertir goles de tiro libre como el que anotó el sábado en El Salvador.
Como el vino. Así es Julio César de León, mejor conocido como Rambo.
“La gente llegó en buen número a ver al nuevo Municipal Limeño, con el trotamundos hondureño Julio César Rambo de León como titular, ante el Pasaquina, en la primera edición de la Copa de la Paz. Trofeo que lo ganó el cuadro de Santa Rosa de Lima por 3-1″, escribió el Diario de Hoy.
A partir del 15′, el cuadro local tomó control del partido y comenzó a aparecer “Rambo” de León. Tras un par de balones perdidos y una falta cometida, el catracho comenzó a dar espectáculo, a tocar de primera, a meter balones profundos -agrega en otra parte de la crónica.
Al 23′, tras una falta sobre Aly Arriola -continúa la nota-, “Rambo” le pidió el balón a Salamanca. Y lo cobró perfecto, lo puso en el ángulo para que la gente festejara el primero.
Rambo es el principal atractivo de la liga salvadoreña a pesar de su edad.
Debido a su carácter alegre y peculiar, la pipol piensa que Rambo es bebedor y que se descuidad fuera de las canchas, pero nada más alejado de la realidad que eso.
No bebe, no baila, y cuando sale siempre anda una botella de agua.
Además, su desempeño en los entrenamientos es ejemplar, al punto que se queda practicando tiros libres por su cuenta, o realiza abdominales para no perder la figuras.
En otras palabras, es todo un PROFESIONAL